Borge dormía en hotel de Trump

+ Documentaba sus gastos y así fue localizado

CD. DE MEXICO, 5 de Junio de 2017.-  Una crónica relata la vida de Roberto Borge los últimos 11 días previos a su detención en la ciudad de Panamá por parte de la Interpol: en una suite “amueblada de manera exquisita con un estilo elegante y cosmopolita”.

Pidió vista al océano Pacífico y cerca de tiendas de lujo, restaurantes caros y bares de primera clase, lo cual le costaba unos mil 500 dólares por noche, más aquello que se le antojara comprar en el Trump Ocean Club International Hotel & Tower, cuyo eslogan es: “El que dice que menos es más, es porque nunca tuvo más”.

La detención ocupó amplios espacios en la prensa internacional, no solo la mexicana. Para el diario El País, el lugar de la aprehensión, el lujoso espacio era la “guarida del político mexicano Roberto Borge”, quien estaría en la mira de un proceso penal por operar con recursos de procedencia ilícita.

Su detención concluyó luego de una acción de la Procuraduría General de la República que confirmó la propia fiscalía nacional mexicana este domingo, en medio de un mar de información relacionada con las elecciones en varios estados, entre ellos el emblemático Estado de México, considerado bastión del PRI, al que Borge pertenece, partido oficial y cuna del grupo en el poder desde hace décadas.

Borge gobernó hasta el pasado año el estado de Quintana Roo, en el Caribe mexicano, y es el último atrapado en esa cadena de ex gobernadores acusados de corrupción, donde están veracruzano Javier Duarte, capturado en abril tras 5 meses de búsqueda, y el prófugo César Duarte, de Chihuahua.

INOLVIDABLE EXPRESION

Medios internacionales como El País han traído del recuerdo la expresión del presidente Enrique Peña Nieto al referirse a ellos (Borge y Duarte), tras ganar la elección de 2012: "Pertenecen a los actores de la nueva generación política que forma parte del Partido".

Borge tuvo un ascenso meteórico en la política a la que ingresó como secretario particular del diputado federal y luego gobernador Ernesto González Canto; luego fue legislador federal y como tal, pide licencia tras solo seis meses para contender por la gubernatura de Quintana Roo.

Ganó con una alianza del PRI, el Partido Verde Ecologista de México y el Panal, este último controlado entonces por la lideresa magisterial Elba Esther Gordillo, hoy detenida por causas de corrupción y lavado de dinero.

Borge puso características especiales a su mandato. En 2014 creó la llamada "Ley antimarchas", que prohibía las manifestaciones, pero también un programa a favor de los desarrollos turísticos, al que poco le importó el resultado ambiental, hoy considerado devastador.

Allí comenzó el principal de sus problemas que ahora lo llevarían a prisión: tratos en la opacidad, para vender inmuebles del Estado muy por debajo del valor comercial a favor de su madre, Rosa Yolanda Angulo, y un presunto prestanombres, César Celso González.

Borge fue investigado pero no había evidencia de sus acciones presuntamente al margen de la ley, hasta que la administración de su sucesor, Carlos Joaquín González, lo denunció la PGR el pasado noviembre. El ahora gobernador de Quintana Roo acusa que Borge enajenó y vendió unas 9 mil 600 hectáreas de terrenos propiedad del Estado en su sexenio.

La PGR dejó ver que la debilidad de Borge por el lujo y el glamur permitieron ubicarlo y capturarlo, en este caso con ayuda de la Interpol. Indagatorias señalan que el ex gobernador tenía una red de colaboradores que le facilitaban el traslado y alojamiento en su huida.

Fue a Miami, La Habana, Bahamas, Panamá e intentaba viajar a París, para finalmente llegar a España según el plan. Allí habría de establecerse en Barcelona, pero se frustró el viaje a la capital francesa con su detención.

Ahora se sabe que Borge llegó a Panamá el 25 de mayo anterior y ya ubicado, dio pie a la Fiscalía mexicana a emitir la orden judicial de detención el pasado 31 de mayo.

Tenerlo ubicado tuvo relativa facilidad. Se desplazaba en Uber, la firma de taxis cuya operación obstaculizó en el Caribe mexicano; se hospedó en el cuarto 24 de la lujosa torre de 70 pisos con forma de vela, propiedad del presidente de Estados Unidos. El rastro era muy evidente.

Agentes de Interpol y la propia PGR no lo creían, pues es temerario hacer eso cuando uno se esconde, opinaron.

Ahora, su detención ha puesto en marcha un procedimiento para lograr su extradición o deportación, según sea su estatus legal en Panamá. Roberto Borge Angulo es el decimoséptimo ex gobernador mexicano investigado por corrupción en los últimos 17 años, y de acuerdo a la agenda de la Fiscalía mexicana, la lista sigue.