Difícil elegir en Guaymas
GUAYMAS.- Las “chatarreras” son el problema, dice un guaymense --cuyo nombre conservo para evitarle problemas con el “crimencito organizado municipal”—al hablar de tanto chamaco robándose cobre en casas o edificios, o saqueando el tren, entre otras fuentes de suministro.
Mi amigo justifica a la Policía no oficiosamente, pues explica que los chatarreros, sabiendo que compran chueco, tienen “casas aparte” --lo que se llamaría “centros de acopio”—para no recibir al malandrín directamente y evidencie al comprador de chueco, esos que antes iban a la cárcel pero parece que ya no, pese a que de entrada, tienen auténticos cochineros en la vía pública y eso ya es delito, por si no lo saben los responsables municipales de Imagen Urbana.
Claro, hay chatarreras al margen de ilícitos, pero la imagen de unas afectan a todas.
Sin embargo, lo que quería decirle de entrada, es que ya le jalaron las orejas a Oscar González García, aspirante a lo que sea, por colocar espectaculares con su imagen, luego en pareja con su esposa, sugiriendo aptitudes para ser candidato.
La “inocencia” de Oscar no fue creída por el Consejo Electoral quien le advierte: quita los anuncios, ya, o te multo con 5 mil salarios mínimos; si insistes, no podrás ser candidato. Donde sí fue inocente Oscar –para empezar, es ingeniero civil, y ya eso choca en el elector por la mala experiencia en marcha--, es en creer que podía engañar a los colmilludos consejeros electorales diciéndoles en apercibimiento previo, que él no era Oscar, sino Oscar Alberto. ¡Qué ternura! ¿No?
Pero de que estamos cerca de definiciones, estamos; vea usted cuántas listas han salido, ninguna definitiva hasta eso, pero no se mueven mucho los nombres entre unas y otras, lo cual genera para la zona guaymense movimientos indicadores de cómo están las cosas. Mire:
Marcos Ulloa salió ya de ISEA-Guaymas –Felicidades, Eduardo Romero, por los números locales y estatales: eso es muy bueno para la educación de los sonorenses-- y me lo reportan del Distrito Federal picando piedra en el PRI nacional por la diputación del 04 Distrito, la misma donde la candidatura panista casi está en la bolsa del delegado de SAGARPA Fernando Miranda Blanco.
Quizá ya se encontró allá a Antonio Astiazarán y a Carlos “El bebo” Zataráin, ex alcaldes ambos, que intentan repetir, el primero desde una oficina cercana a la gente de Enrique Peña Nieto, y el segundo con Emilio Gamboa Patrón, aunque siendo dirigente nacional de la CNOP no lo pudo apoyar por la estatal.
Por la local el PRI sigue sosteniendo a Susana Corella y el PAN a César Lizárraga, pero la diferencia es que el alcalde guaymense está en el aire, pues la gente de Juan Bautista Valencia tiene dificultades para negociar con él, olvidadizo como es en los acuerdos.
La indefinición panista tiene todavía tiempo para madurar resultados, pero llama la atención que en las demás ciudades “grandes” de Sonora tienen todo “planchado”, indicador de que Guaymas sigue siendo foco rojo para todos los partidos.
Manuel Aguilar Juárez, el “amarrado”, en corto confirma ser, pero condiciona el planchado completo o se retira. No quiere guerra intestina pues sabe que así la perdería fácil, cual ocurriría con Moisés Laguna en Empalme, quien a favor tiene el enroque pactado con el alcalde Javier Caraveo, ya que éste no tuvo un secretario conflictivo y acaparador.
El PRI no tiene problema, pues buscará recuperar la alcaldía con Otto Claussen, candidato de peso completo, capaz de aglutinar y no ser problema para otros partidos pues es un mago en lo fundamental de la política: la negociación. Y la negociación, es que todos ganen, con el pueblo en general primero.
Cuando preguntan por Gastón Lozano y su intento por figurar por el 04, la respuesta es que la golpiza moral que le propinaron fue contundente. Rudeza innecesaria, también, y frustran un buen proyecto para el futuro.
Mas negocios
José Luis Castro Ibarra es director de Administración Portuaria Integral. Hacer negocios para el puerto es su función y la hace muy bien. En los últimos 4 años impulsa un proyecto que triplicará la capacidad operativa de esta terminal marítima desde su llegada hasta el 2012. Eso es mucha inversión y empleo en esta zona.
De salida, saludo a Mario Cuen, de Impulsor, quien tranquiliza al señalar que el proyecto Playa Miramar estará listo en Semana Santa. Bien. (Tomada de EXPRESO)