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+ Aprueban regidores detener el desorden urbano; deben comenzar con San Carlos y con su gente; los dineros del “Puente Metropolitano”; ejemplares excepciones de edificios rescatados; PAN: la vieja práctica de pintar bardas, en lugar de calles
GUAYMAS, Son.- Ya hubo acuerdos la mar de interesantes en el Cabildo, pero con la duda de si los representantes (¿?) populares en el Cabildo levantaron la mano para desocuparse pronto, agradar a quien le pidió aprobar eso o, realmente, emprender una cruzada para poner fin a tanta leperada que destruye todo plan de desarrollo armónico en el Municipio.
Tras el ritual típico con alto consumo de agua, café y galletas, a pocos atrajo lo que está en juego. A quien sí, lo disimuló bien. Miren lo que planteaba el aprobado punto 6:
“Asunto relativo al dictamen de la Comisión de Gobernación y Reglamentación Municipal, respecto de creación de la Comisión en materia de Zonas Metropolitanas y Facultades de la misma”.
Hace décadas hay gente luchando por captar beneficios de programas federales para Zonas Metropolitanas y no han podido, porque nuestras autoridades estaban ocupadas en otras cosas, por eso hemos dejado de recibir mucho dinero. Y cuando recibimos, nos lo robaron.
¿Se acuerda del Puente Metropolitano?
Fue propuesta de esa gente, que sí quiere a Guaymas, pero lamentablemente el dinero gestionado por la diputada federal de la época, Susana Corella, siguió la ruta típica: lo aprobó el Congreso Federal, lo envió la Tesorería de la Federación al Gobierno del Estado; lo recibió la Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano y… entró a la “licuadora”.
Dos veces habría ocurrido lo mismo. Y dos veces “perdieron” decenas de millones de pesos. Todo quedó en un recarpeteo asfáltico y un barandal. Ah, y la crítica destructiva sobre la diputada, no en el titular de SIDUR, Ricardo Martínez Terrazas, principal beneficiario de la manga ancha que caracterizó al sexenio de Claudia Pavlovich.
Saltemos al punto 8, también aprobado, para insistir en la incorporación de la Comisaría de San Carlos al programa “Pueblos mágicos”, que le obliga “a trabajar en conjunto con las dependencias correspondientes” a fin de cumplir los siguientes compromisos:
1.- “Otorgar permisos de construcción, únicamente inmuebles que armonicen con la arquitectura local, conforme a la normatividad aplicable.
2.- Ejecutar programas de mejoramiento y conservación de la infraestructura e imagen urbana y/o rural.
3.- Instrumentar programas de reordenamiento del comercio semifijo y/o ambulantaje en su caso.
Imagine el saco de alacranes sobre la alcaldesa si logra aplicar lo aprobado. Nadie ha logrado meter en cintura a los constructores, por eso no hay armonía en la arquitectura local --suponiendo que exista--, como tampoco se mejora y conserva la infraestructura e imagen urbana y/o rural.
En esto último resaltan las excepciones de la regla. Imposible no reconocer la obra de Jorge Corral para restaurar el edificio del Club Friend´s en Abelardo L. Rodríguez. Nadie debería llegar a Guaymas sin visitarlo y, de paso, disfrutar la convivencia en su “Sport bar” en la parte superior.
O el inmueble de 1840 adquirido por la familia Véjar en 1908 y restaurado hace unos años por Gabriel Véjar para operar servicios aduanales y mostrarlo como orgullo del Centro Histórico.
Y qué decir del también restaurado –está en etapa de equipamiento-- edificio de Banco Nacional de México que, prometió Germán Uribe, “quedará igualito” que cuando se inauguró, en 1904. Quizá mejor, digo yo, porque incorporar áreas de servicio para ser un hotel “boutique”, restaurante y club privado.
Muchas otras edificaciones históricas han sucumbido víctimas de la piqueta o el descuido, ambos igual de nocivos, pero al ver la manifestación del Cabildo aprobando reglas, se enciende una luz al final del túnel que sugiere, los guaymenses han comenzado a entender la importancia de preservar su identidad.
Eso justifica con creces la obra que ya tiene bajo la lupa el contralmirante Rogelio Bello, titular de la empresa concesionaria del movimiento de carga en el puerto, pues se retrasaba el trabajo de la fantasmagórica empresa contratada por el almirante secretario y su gente allá en la CDMX.
Reaccionó cuando vio la posibilidad de perder el contrato y, personalmente, el gobernador Durazo y el secretario de Marina, José Ojeda, visitaron el lugar para dar el ultimátum. No cómo quisiéramos –Arturo Sandoval lo explica mejor--, pero “a´i van” y deben entregar el tramo de calle 29 hasta el obelisco a los Héroes del 13 de Julio en García López, el 21 de diciembre. A ver.
Ah, la constructora, según el difícil acceso a las plataformas de información oficial, se llama Procesos de Ingeniería Aplicada, S.A. de C.V., al parecer de Guadalajara, pero su representante es Jaime Cuauhtémoc González Juy, quien presenta un domicilio oficial en la CDMX.
Es quien debe responder por qué no pudieron, o sí, terminar y entregarla en diciembre, como es la intención presidencial.
OBRA QUE CONTRADICE:
En calle Plutón, Sector Crestón, en San Carlos, construyen un edificio que no se adapta a la arquitectura del lugar. Al contrario, viola reglas, va hacia su cuarto nivel y, entre otras cosas, carece de banquetas al ocupar ese espacio la cimentación; tampoco hay trazo de estacionamiento pese al proyecto de usarlo como departamentos habitacionales de renta.
El ayuntamiento no habría autorizado, tampoco la Comisaría, esa obra propiedad –dice rústico texto a mano en hoja blanca--, de Malanco Construcciones, confirmando “departamentos verticales” sobre 1,066 metros cuadrados.
Agrega que hay una licencia, la No. 1899-2021 y el DRO (¿director responsable de obra?) sería el Ing. Chrystian Jesús Barrera Pérez. Aclarar que no hay incorrecciones y, si es así, que Tesorería debe gastar un poco más en papelería y sellos, es fácil. Y es buena base para comenzar a trabajar en eso que el viernes al mediodía, aprobaron los regidores.
BUEN MENSAJE
El reportero Raúl Rodríguez destaca redes sociales un buen mensaje:
Mientras nuestras calles no se balizan porque no hay dinero para comprar pintura –acuérdese: las trácalas de los alcaldes anteriores se llevan casi el 60% del presupuesto—, regidores del PAN andan pintando bardas para proponerse como opción de los votantes en 2024, una herencia del pasado que ya no atrae a nadie. Molesta más bien y debieran comprar pintura para la causa. Eso haría suponer que realmente les interesa Guaymas, no solo la tesorería de su Ayuntamiento. Tómenla en cuenta.