Lo hizo: Donald Trump ganó las elecciones

NUEVA YORK.- El republicano Donald Trump ganó las elecciones presidenciales de Estados Unidos y se convertirá en el 45º presidente del país, tras un desenlace sorpresivo que puso fin a una campaña hostil y que fue capaz de provocar división en la sociedad estadounidense.

La demócrata Hillary Clinton, su adversaria hasta entonces, lo llamó en la madrugada para conceder la derrota, con lo cual se coronaba una condición inédita en los 240 años de vida de la democracia de Estados Unidos, que sacudió a los mercados financieros, dejó incrédulo a medio país y al establishment político, económico y cultural.

Los republicanos tendrán poder amplio para desarrollar sus agendas, pues además retuvieron el control de ambas cámaras del Congreso.

La elección fue reñida y su resultado muy cerrado, como anticipaban los sondeos. Trump obtenía el 47,8% de los sufragios, o poco más de 58 millones de votos, contra un 47,4% para Clinton. En el Colegio Electoral, el órgano que elige al presidente, Trump tenía 279 votos, 9 por encima de los 270 necesarios para llegar a la Casa Blanca .

El magnate inmobiliario lideró un movimiento contra el “establishment” de Washington, asimismo contra el propio Partido Republicano, y dominó la elección tras una campaña de división, hostil y desgastante.

Trump ganó en Florida, Ohio, Pensilvania y Wisconsin, los "estados pendulares" más importantes y los que le brindaron la ventaja casi decisiva para los 270 votos que necesitaba. El mapa electoral de la elección dejó las divisiones de Estados Unidos a la vista: Clinton aparecía mejor posicionada en las costas cosmopolitas, en la "nueva economía"; Trump se impuso en el centro rural, el sur del país y en Rust Belt, la región que más ha sufrido el éxodo de fábricas que provocó la globalización y la pérdida de empleos por los avances tecnológicos.

No sirvieron los señalamientos por los insultos que lanzaba en sus incendiarios discursos, ni las acusaciones de acoso sexual en su contra ni sus polémicas declaraciones; tampoco el mensaje xenófobo, racista y nacionalista de su campaña. Ni siquiera le hizo mella el rechazo del propio Partido Republicano. Nadie lo pudo frenar y ahora el presidente electo se apellida Trump.

SE MODERA

"Los hombres y mujeres olvidados de este país no volverán a ser olvidados", prometió Trump, en su discurso de victoria, el más moderado desde que lanzó su candidatura.

Su mensaje populista y proteccionista, en contra de los acuerdos de libre comercio, prendió muy bien en el norte y el centro del país, el ya citado Rust Belt. El triunfo echó por tierra el sueño de muchos estadounidenses de llevar a la primera mujer a la Casa Blanca.

Cuando asuma la presidencia, Trump se convertirá en el primer hombre en liderar a la primera potencia global sin haber ocupado jamás un cargo público. Será el líder de la primera economía mundial y el comandante en jefe del ejército más poderoso del planeta.