Cae otro ex gobernador
+ Se trata del tamaulipeco Eugenio Hernández Flores
CD. DE MÉXICO, 6 DE Octubre de 2017.- La Procuraduría de Justicia de Tamaulipas atrapó este viernes al ex gobernador Eugenio Hernández Flores por el delito de peculado y lavado de dinero.
La instancia judicial de la entidad abrió la averiguación penal 14/20017 contra el ex mandatario, por la compra ilegal de terrenos en el Puerto de Altamira, que inicia una serie de procedimientos que llevan a la ilegalidad, precisó Francisco García, titular de Comunicación Social estatal.
La investigación penal en contra de Hernández Flores señala que esos terrenos fueron cedidos por el gobierno federal a Tamaulipas para realizar un proyecto de un Canal Costero, durante el gobierno de Manuel Cavazos Lerma, pero más tarde el gobierno de Tomás Yarrington formó un fideicomiso para vender esos terrenos, que en esa época tenían un valor de 1,600 millones de pesos.
Los terrenos fueron vendidos durante el gobierno de Hernández Flores, en el año 2007, primero al empresario favorito de Yarrington, Fernando Cano, en tan sólo 16 millones de pesos. Enseguida, Cano traspasó los terrenos a Alberto Berlanga Bolado, un empresario constructor señalado por lavar dinero al gobernador Hernández Flores.
Hernández, de 58 años, es originario de Ciudad Victoria y gobernó Tamaulipas durante el periodo 2005 a 2010, y fue alcalde de su ciudad natal del 2001 al 2004; diputado federal y coordinador del Comité de Financiamiento del candidato a gobernador Tomás Yarrington.
En 2012, la Subsecretaría de Investigaciones Especializadas en Delincuencia Organizada (Siedo) le incautó ocho propiedades en la zona de Cancún y dos más en Playa del Carmen al ser investigado por lavado de dinero y delincuencia organizada, indagatoria del mismo expediente por el cual fue acusado el también Tomás Yarrington, quien ahora se encuentra en Italia sujeto a un juicio de extradición.
Por su parte, la Administración para el Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA) informó en el 2014 que Hernández recibió sobornos de un cártel de la droga durante el tiempo que fue gobernador, para permitirle operar libremente en el estado. Ese dinero fue lavado en Texas por medio del empresario Guillermo Flores Cordero, quien lo implicó cuando fue arrestado por la DEA.
La Corte Federal del Distrito Sur de Texas, con sede en Corpus Christi, emitió en mayo del 2015 una orden de arresto contra Hernández por el delito de lavado de dinero y añadió el cargo de defraudación bancaria.