Detienen a uno de los “Porkys”

+ Dos más tramitan amparo para evitar su arresto

CD. DE MEXICO, 12 DE Mayo de 2016.- Enrique Capitaine Marín, uno de los cuatro acusados de la violación de Daphne Fernández, fue arrestado en Torreón, Coahuila.

Autoridades veracruzanas lo comunicaron oficialmente afirmando que fue gracias a los trabajos de inteligencia e investigación en coordinación con autoridades del norte del país.

Tras ser capturado, Capitaine fue trasladado a Veracruz, para hacer frente a un proceso legal por el delito de pederastia. El diario Reforma divulgó que el joven llegó al estado a las 03:30 horas del miércoles en un jet del gobierno estatal, bajo custodia de elementos de la Policía Ministerial, y fue ingresado al Penal del Puerto de Veracruz, "El Penalito", donde este jueves rendía declaración.

El Fiscal General de Veracruz, Luis Ángel Bravo, declaró que el joven podría permanecer 72 horas en "El Penalito" para determinar su responsabilidad por presunto abuso sexual en modalidad simple, delito por el que podría recibir una condena que va de los seis a los veinte años de prisión.

No se determinó la situación jurídica del resto de "Los Porkys", Diego Cruz y Jorge Cotaita, contra quienes también se ha girado orden de aprehensión, y de Gerardo Rodríguez Acosta, quien habría presenciado la violación.

 

BUSCAN AMPARO

Jorge Winclkler, abogado de Daphne Fernández, informó Jorge Cotaita Cabrales y Diego Cruz Alonso Alonso, involucrados en el caso de presunto abuso sexual, promovieron un juicio de amparo en contra de su aprehensión.

Dijo no saber dónde están, “quizá escondidos esperando qué es lo que se resuelve en relación con la situación jurídica de Capitaine”, comentó el defensor de la menor.

Espera que los tribunales de Veracruz sean imparciales e independientes y apliquen la ley. Escucho al papá de Enrique Capitaine decir mil cosas y lo entiendo, es su papá y tendrá que hacer todo lo que esté a su alcance para tratar de ayudarlo, pero a mi criterio, las pruebas que están en el expediente justifican que se haya girado una orden de aprehensión, sostuvo.

Finalmente, negó que Javier Fernández Gómez haya intentado comprar a los padres de los jóvenes con un millón de pesos, o que haya habido un intento de secuestro, pues “no hay ninguna prueba de ello”.