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Estas líneas...

+ Que la alcaldesa encabeza encuestas… dicen sus enemigos; hay opciones serias y ya las buscan; a Garayzar no le alcanzó: el Congreso aprueba entregar los puertos a la Semar; golpe certero al “Roger”; Sindicatura y Catastro no quieren, pero deben regularizar suelos; no sube el predial, pero cuesta más

 

GUAYMAS, Son.- Una encuesta atribuida a Mitofsky da ventaja con 30 puntos a la alcaldesa Sara Valle Dessens, sobre el personaje de más fuerza en la carrera por la alcaldía de este tan maltratado puerto.

Pronto desmintió la propia empresa de Roy campos, lejana a trabajos de tan baja calidad como lo refleja esa intención de afectar a quien ahora preside el Ayuntamiento, al colocarla junto a figuras de escasa o nula preferencia, excepto el secretario de Salud, Enrique Claussen Iberri.

O al regidor Ernesto Uribe, formado y con capacidad gestora; Uribe dejó los reflectores, pues quiso trabajar en lo que debe hacer un regidor, pero fue decepcionante exponer ilegalidades y ser abrumado por la incapacidad y entreguismo del mayoriteo oficial.

El caso es, la vocería de la alcaldesa negó saber origen de la desmentida encuesta. No obstante, “por el arma que utiliza se conoce al asesino”, dijo alguna vez un conocido criminólogo.

Baste ver nombres para determinar que la autoría viene de gente de baja estatura política. Y tienen qué ver con las piedras en el zapato que ha traído doña Sara, desde su primera y fallida incursión en la alcaldía hace dos décadas. El Guaymas nuestro de cada día no mejora, tampoco, en materia electoral.

Resta esperar que Mitofsky reciba solicitud de un trabajo serio y en el documento a emitir, estén aquellos en las que ya piensa la gente seria, como Rogelio Sánchez de la Vega, Gines Valentín Rodríguez, Manuel Olmedo, Enrique Claussen, Carlos Villarreal, Jesús Saldaña, Javier Carrizales, Heriberto Aguilar, Rodolfo Lizárraga, Cuauhtémoc Benavides, Servando Rodríguez, entre otros, no muchos.

Servando hace equipo con Saldaña, pero ya se fijó en él Ricardo Bours y podría llamarlo a su lado, como ha llamado a Cuahuhtémoc Benavides, reconocido abogado autor de tarea social la mar de útil, pero “Temo” prefiere que su mano izquierda no sepa lo que hace su mano derecha.

En cuanto a Carlos Villarreal, es el comerciante visto por el PAN como quien puede traer aire fresco al blanquiazul; Rodolfo Lizárraga por sus años picando piedra a favor de la gente; Heriberto Aguilar, apreciado en el morenismo por su labor de campo y ahora en el congreso federal, además de su cercanía con quienes tienen el poder. Y siga usted el análisis.

Algo que resaltar del diputado federal Heriberto Aguilar: ayer publicó que “la trayectoria política del Dr. Alfonso Durazo lo posiciona como un referente indiscutible a gubernatura de #Sonora. Estoy seguro que, una vez que los tiempos lo permitan, en #Morena estaremos listos para apoyarlo y lograr la anhelada #Transformación de nuestro estado”. Se ayudarán mutuamente.

Durazo ya confirmó lo obvio, que le interesa ser candidato, y legalmente debe estar listo el 6 de diciembre, pero recordó que el presidente López obrador pidió a los aspirantes entregar su cargo de una vez, así que no tarda el bavispense en separarse de la Secretaría de Seguridad Pública.

Por cierto, López Obrador vendría a Sonora este fin de semana y será interesante el análisis de lo que dejó su visita en lo material, financiero y por supuesto, político.

TIROS RÁPIDOS:

1.- La promoción del marino comercial guaymense Rogelio Garayzar y grupos que le respaldan en el país para evitar que los puertos del país se militaricen, parece haber sufrido la estocada la tarde de jueves:

Los diputados federales aprobaron que la Secretaría de Marina controle los puertos, tras el dictamen que termina de quitar ese control a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Hubo 263 votos a favor, 43 abstenciones (PRI y PAN), en contra 85 (PAN, MC y PRD); la Semar administrará puertos, la educación relacionada con el mar y el comercio marítimo.

El argumento principal es que hay corrupción en los puertos y eso evita su desarrollo. Sobre todo, el propio presidente López Obrador lo destaca, se usan para el tráfico de drogas. Todos.

Ojalá nuestros marinos no caigan en lo que ahora reprochan a la SCT y en unos 30 o 40 años los futuros diputados reviertan esta decisión, pues el único garante de la Ley y la soberanía hoy es la fuerza armada.

2.- De esgrima, el golpe al coordinador de los diputados priístas en el Congreso estatal, Rogelio Díaz Brown, originado en Cajeme, su tierra. El también ex diputado federal y ex alcalde, acusó recibo, pues sabe que detrás de la versión soltada, estarían enemigos fuertes como su ex padrino Ricardo Bours.

Mientras se aclaran las cosas, o no, “El Roger” está en boca de todos porque la versión filtrada dice que negocia traición a su partido, para aparecer en la próxima elección como aspirante plurinominal a diputado federal por el PT, pues no ve futuro para sus siglas. Con este tipo de cosas, cómo.

3.- El Ayuntamiento de Guaymas recibió notificación formal del poder judicial y de la parte actora, del sobreseimiento del juicio en el cual el terrateniente urbano José Ordaz se apoderó de 28 hectáreas propiedad de Granja Monarca, pero no pudo demostrar su propiedad.

Ahora, la propietaria legítima y la comuna trazan las formas para regularizar esos 280 mil metros cuadrados; tarea colosal, pues incluirá unos 300 lotes vendidos a desarrolladores de vivienda y a familias trabajadoras que ya los pagaron y por eso podrían surgir en breve demandas encaminadas a recuperar esos dineros, más de 70 millones de pesos.

Así se han manejado los suelos del puerto durante décadas, pero se supone que eso acabó con este golpe aplicado por la ley a quienes la evaden, aunque no muestran muchas ganas de entrarle ni el medroso síndico Martín Ruelas, ni “el señor de las fichas (policiacas)”, Jorge Villa Flores, director de Catastro Municipal.

De salida: en la ventanilla donde Tesorería Municipal cobra el predial, un guaymense preguntaba por qué, si no sube este impuesto, le exigen mil 200 pesos en lugar de los 500 pagados en 2019. La trabajadora no le pudo explicar que la trampa es revalorizar el bien en el papel que autorizan los regidores, pese a la ausente plusvalía por la falta de servicios y el deterioro de la infraestructura urbana.