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+ Claudia Pavlovich y las cuentas claras; dos independientes por la alcaldía de Guaymas; por fin hay autoridad del Trabajo

 

GUAYMAS.- El manejo del dinero público desde un gobierno califica a los titulares de las dependencias responsables de utilizar ese recurso en la mejoría de la gente y fallar, provoca cuestionamientos a veces tan destructivos que acaban con carrera y honra de políticos, más aún en épocas de campañas políticas.

Pero Sonora es la excepción por tercer año consecutivo, al confirmarse esta entidad y la administración de la gobernadora Claudia Pavlovich Arellano, en el primer lugar nacional en observaciones relevantes en ese tan celoso rubro de gastar bien el dinero.

Es decir, otra vez somos el estado con menos monto observado, según la tercera y última entrega de informes de la Cuenta Pública 2019 de la Auditoría Superior de la Federación. Sobre eso, el contralor estatal va directo al punto sobre lo que significa para Sonora y lo resume así: genera confianza en las y los ciudadanos de que sus recursos se están aplicando correctamente.

Miguel Ángel Murillo Aispuro, el secretario de la Contraloría General del Estado puntualiza: desde el inicio de la actual administración, la gobernadora Claudia Pavlovich ha impulsado acciones de trabajo en materia de control, prevención y rendición de cuentas, con el propósito de cumplir el compromiso de tener un gobierno transparente, que responda con hechos al reclamo ciudadano de combate a la corrupción.

Efectivamente es lo que pide el ciudadano, combatir la corrupción. Por eso llega como un olor agradable el anuncio de la ASF, órgano fiscalizador nacional que depende de la Cámara de Diputados y que cada año audita el gasto de los fondos federales etiquetados para Educación, Desarrollo Social, Seguridad e infraestructura y participaciones federales –ramo de mayor cuantía—revisando 7 de cada 10 pesos aplicados.

En pesos, es una enorme lupa sobre 37 mil millones. Al terminar, por tercera vez resultamos con el menor monto por aclarar de todos los estados del país. Nada es perfecto, por eso hay una diferencia de 605,200 pesos, dice el dato hecho público por la ASF en su página de internet y lo puede corroborar cualquier ciudadano. Por supuesto, ese comparativamente diminuto porcentaje también deberá aclararse en los siguientes 30 días.

En 2017 y 2018, prácticamente Sonora tuvo cero monto observado, como ahora en 2019. Crece la relevancia al recordar que estábamos entre los seis peores a nivel nacional; en 2014 Sonora fue el sexto estado con mayor monto observado “y hoy, para orgullo sonorense, pasa a ser el primero a nivel nacional”, señala un satisfecho Murillo Aispuro, al usar el dato para  comprobar que el dinero es bien ejercido y “una manera de mantener la confianza en el gobierno”.

Tiene razón. Para la gente un discurso es solo eso, pero un buen resultado es una obligación de las administraciones públicas y un derecho de los ciudadanos. Sonora interpreta bien tal premisa en lo que va de la gestión de la gobernadora Claudia Pavlovich y lo confirma ya tres veces una entidad federal, así que no es un autoelogio.

En estos tiempos electorales, sería una gran contradicción usar el antecedente de muchos políticos como rasero para medir a quienes ahora gobiernan el estado, así que el plan de pegar para crecer deberá sustentarse en otros argumentos, que en el cuidado del dinero todo indica, estamos bien y eso debe celebrarse.

GUAYMAS: DOS INDEPENDIENTES:

El Instituto Estatal electoral aprobó cuatro candidaturas para alcaldías y dos de ellas, para Guaymas. A las propuestas de la alianza “Va por Sonora” (Rogelio Sánchez), PT (Rodolfo Lizárraga), Morena (¿David pintor?), Redes Sociales Progresistas (Alberto Albín) y demás, sume usted a Yadira Cota Lugo y Joel Mendoza Rodríguez, quienes decidieron ir por la libre ahora que los partidos estorban a los candidatos.

VISITA FURTIVA: El histrión Horacio Valenzuela, en sus ratos libres secretario del Trabajo para complicar la vida de los trabajadores de Sonora, visitó furtivamente Guaymas para tomar protesta a la titular de la Junta de Conciliación y Arbitraje, Graciela Martínez de la Torre, quien ni con sus más de 20 años de experiencia pudo con sus últimas dos chambas, pese a lo cual el secretario de Trabajo que se deshizo del piojo en lo que va del sexenio, la llamó “una mujer muy competente”.