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Estas líneas...

+ A 27 años del asesinato de Colosio; las balas asesinas modificaron la historia; abundan partidos y candidatos

GUAYMAS, Son.- Se cumplieron 27 años del asesinato de Luis Donaldo Colosio, candidato del PRI a la Presidencia de México, ocurrido en lo que era una complicada barriada de Tijuana, Baja California.

En Sonora hubo eventos para recordarlo y en uno de ellos estuvo Alfonso Durazo, quien fuera secretario particular del malogrado sonorense, quien acudió a su tumba en Magdalena de Kino; y Ernesto Gándara, presente frente al monumento a Colosio en Hermosillo.

Distan de ser aquellos desplazamientos masivos para recordar a quien sacudió conciencias aquel 6 de marzo de 1994 frente al monumento a la Revolución en la Ciudad de México. Unos cuantos recordaron al político magdalenense que veía a un “México con hambre y sed de justicia”, y “un México agraviado por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían servirla”.

Veía el México que ya llegó, lo citaba en este fragmento de su discurso: “veo a ciudadanos angustiados por la falta de seguridad, ciudadanos que merecen mejores servicios y gobiernos que les cumplan. Ciudadanos que aún no tienen fincada en el futuro la derrota; son ciudadanos que tienen esperanza y que están dispuestos a sumar su esfuerzo para alcanzar el progreso”.

Y lean este: “¡México no quiere aventuras políticas! ¡México no quiere saltos al vacío! ¡México no quiere retrocesos a esquemas que ya estuvieron en el poder y probaron ser ineficaces! ¡México quiere democracia, pero rechaza su perversión: la demagogia!

Qué familiar me suena eso. Es tan vigente. Debí escribir esto ayer, pero fue tarde el evento al que me invitó Julián Luzanilla, un priísta probado y político de veras. Se desarrolló frente al busto en una pequeña plaza de Guaymas Norte, ya rodeada de mancha urbana.

Una veintena de personas respondieron a la convocatoria de quienes sostienen aquí la Fundación Colosio del PRI, Martín Larios Velarde y Edmundo Chávez Méndez. También, claro, porque era invitado especial Rogelio Sánchez de la Vega, candidato de la Alianza Va Por Sonora a la alcaldía de Guaymas.

Había historia allí. Colosio tenía amigos en este suelo y anécdotas con personajes conocidos, aunque algunos ya le acompañan en la eternidad.

Imposible no recordar que uno de los presentes, Edmundo Chávez, era proyecto en crecimiento por su cercanía con quien fuera diputado federal, senador, secretario de Desarrollo Social y presidente del PRI nacional. Colosio lo hizo delegado de Sedesol y se especuló su ruta por la alcaldía, pero eso se negaba en las alturas tricolor, porque “Luis Donaldo tiene otras cosas para él”.

Alguna vez lo confirmaron por aquí operadores destacados como César Augusto Santiago o Carlos Armando Biebrich, responsables de la agenda electoral colosista. Santiago hoy hace tarea para Ricardo Bours; Biebrich, acaba de morir por efectos del Covid. Finalmente Chávez fue candidato y ganó la alcaldía con copiosa votación; Martín Larios fue colaborador en el desarrollo urbano.

Otro presente fue Alfonso Ayala, a quien las balas asesinas de Lomas Taurinas también afectaron, pues la especulación era que Chávez Méndez pasaría a ocupar un puesto en el gabinete federal y Ayala sería candidato, o alcalde sustituto, si no diputado local. Hoy, “El Poncho” asesora a Rogelio.

Otro personaje en el lugar fue el colosista probado, amigo de don Luis Colosio más que de su hijo Luis Donaldo, Jorge Luis Fernández Estrada. El ejecutivo de la representación de los avicultores sonorenses apuntaba para una serrana diputación local, oriundo como es de Opodepe, pero quedó en el camino cuando Manlio Fabio Beltrones envió a esa posición al profesor Gonzalo Hirata Rubiano, experto comunicador y publirrelacionista. El ex gobernador le pidió esperar y el tiempo se ha ido. Creo.

Solo faltó el empalmense Miguel Gaspar Bojórquez. Y lo cito porque debo completarle la terna de la época junto a “Mundo” Chávez y “Poncho” Ayala. “El Pilo”, exalcalde de Empalme y elaborador de estrategias y discursos para Colosio, habría sido el diputado federal del 04 Distrito.

De todo eso me acordé al acudir a la plazoleta donde ahora convive una nueva generación que poco sabe del malogrado candidato tricolor, cuya muerte causó estragos en la política y la economía del país.

E insisto, fueron muy pocos de aquellos que llenaban ese espacio y obligaban a cerrar la calle, por eso quizá vino a mi mente la expresión del bacobampense exdiputado, exlíder agrario y varias veces funcionario federal, Juan Manuel Verdugo, cuando cuestionábamos su omitida impresión sobre los resultados de la enredada investigación del magnicidio. Fue en una entrevista en el hotel de playa Los Algodones, de la familia Astiazarán: “Colosio ya es historia”.

MUCHOS CANDIDATOS:

Si usted cree que hay muchos candidatos en sus distritos o municipios, mire en Morelos: más de ocho mil 800 ciudadanos se registraron para puestos de elección popular y solo por la alcaldía de la capital, Cuernavaca, hoy controlada por la coalición de Morena, van 19 aspirantes. En la entidad, 23 partidos políticos disputarán 36 ayuntamientos y 20 diputaciones locales.