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Estas líneas...

+ Salud le bajó “dos rayitas” en San Carlos; pedirán la prueba Covid-19, pero no a todos; distinto rasero para medir: los yaquis harán su baile sin restricciones; el CM-PAN Guaymas, de ornato

GUAYMAS, Son.- Miren dos titulares que llaman la atención:

“5 mil pruebas Covid gratuitas en Semana Santa aplicará el Ayuntamiento, de Hermosillo”, y “Solicitarán prueba anti-Covid excepto a quienes tengan reservación en hoteles o casas de renta”.

Sí, el primero habla de pruebas de antígenos gratis en estos días de paseo en playas o campo, a cargo del Ayuntamiento de Hermosillo, pero es diferente en Guaymas, donde el “filtro” sanitario de la Secretaría de Salud operará de jueves a domingo y solicitará la prueba, excepto a quien haya reservado hotel, casas de renta, restaurante o yate.

La sentencia: “Aquél paseante que no tenga manera de demostrar estar libre del coronavirus, no podrá pasar durante el fin de semana”. Luego de los “zipi-zapes” de prestadores de servicio y titubeantes funcionarios de Salud, se tomaron esos acuerdos que ya se difunden. Finalmente, se trata de “evitar aglomeraciones en playas y una tercera ola de contagios en Sonora”.

Este jueves comenzará a llegar la gente. Se llenará San Carlos y sus playas, lo que no ocurrió el año anterior por el terror que nos provocaba el virus; esta vez, con menos temor, viene más gente pero no como antes de la pandemia, por eso se dispuso prohibir acampar en playas, estacionar vehículos en el bulevar; playas y el Mirador Escénico cerrarán a las 6 de la tarde, venta de cerveza hasta las 22 horas y antros y restaurantes operarán al 50% de aforo.

No cometa imprudencias pues, vacacionista alborotero, porque vigilará la Policía estatal y municipal, pero si no les temes, habrá con ellos personal de la Secretaría de Marina y la Guardia Nacional, quienes saben persuadir, disuadir y –por eso, no los provoques-- reprimir.

Volviendo a la prueba gratis que ofrece Hermosillo, contrasta con la ausencia del Ayuntamiento con este tipo de acciones. Aquí se instalará desde este jueves un módulo de atención donde un laboratorio privado realizará las pruebas rápidas. Costarán 599 pesos y las aceptará la Secretaría de Salud.

Sugiero, porque mucha gente lo comenta, más laboratorios, pues ocuparán unas 10 mil en el peor escenario esperado de visitantes, pero podría triplicarse, en el mejor; imposible cumplir con solo uno; además, ya se piensa mal de políticos que en todo miran negocio como el que ya ocurre con las tarjetas de residente. Recuerden que es obligación la prueba, así que no debiera costarle al obligado, pero finalmente, se trata de que no vayan a la playa.

YAQUIS HARÁN SU GRAN BAILE

Este domingo habrá un “gran baile” en la plaza principal de Vícam, cabecera principal de los 8 pueblos yaquis, y no habrá sana distancia, tapabocas y demás protocolos.

El secretario del Ayuntamiento, Arturo Lomelí, tuvo que decir –evade el tema por temor a… ¿qué?—, que la etnia no ha pedido permiso y si lo hace “no entregaremos ninguna anuencia”.

Recordó los eventos anteriores, para los que llegaron solicitudes, pero contesto que están prohibidos los eventos masivos por acuerdo del Comité Municipal de Salud. Pero los realizaron y no hubo sanciones contra nadie.

Esta vez el tema fue puesto en la Mesa de Seguridad donde participan los tres órdenes de Gobierno. Al leer eso, pensé que la autoridad se fajaría los pantalones e impediría el baile, pero no. El tibio jefe de Jurisdicción Sanitaria, el viejo político obregonense Antonio Alvídrez, dijo que “buscarán el diálogo con las guardias tradicionales yaquis para persuadirlos y llegar a un acuerdo que no ponga en riesgo la salud de la tribu”.

Ni Lomelí, del Ayuntamiento, ni Alvídrez, de esa bucólica oficina en Cajeme, apelan a la ley. Prefieren el trillado mensaje de “somos respetuosos de los usos y costumbres”. Solo harán llegar una solicitud a la etnia porque les preocupa “el cuidado a la salud”. No, pues no.

Qué distinto a lo que hacen en San Carlos, donde cae toda la burocracia represora e impone cosas como las que debieron parar los prestadores de servicios para que le bajaran dos rayitas.

A los yaquis no les exigirán examen anticovid, sana distancia, gel, sanitización. Tendrán su pachanga sin anuencia y no pasará nada. No irá la coordinación de Alcoholes, ni la Coeprisson, Cofepris, la Secretaría de Salud, o el Ayuntamiento acompañado de la fuerza pública, a parar ningún baile ni sancionar a nadie.

Evidenciada, la autoridad a través de estas instancias, demuestra que sus medidas no se aplican con el mismo rasero y el mensaje es muy malo.

PAN, LA CRISIS QUE VIENE

El Comité Municipal del PAN en Guaymas entrará en crisis en estos días. Hasta la renuncia de Carlos Dueñas se prevé, porque el Consejo Estatal en Hermosillo se repartió el pastel estatal sin “pelarlo”.

Por ejemplo, la diputación local del XIII Distrito se había apuntado y acordado para Blanca Sánchez, pero mandaron a Irma Campillo y será la única a registrar; no tan extrañamente si se toma en cuenta que fue propuesta y respaldada por su amigo Mario Cuén, figura importante del padrecismo, quien pudo más que Agustín Rodríguez (el “malo”), el impulsor –y no tanto-- de Blanca.