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Estas líneas...

+ Comienza a aclararse el largo saqueo contra el Isssteson; el Tribunal de Justicia Administrativa se limpia; la suciedad está en todo el Estado, pero también vienen cambios; perciben visitantes que en Guaymas “ya se nota el cambio”

GUAYMAS, Son.- Es bueno aclarar la trama de esa triangulación realizada por funcionarios del Isssteson y de otros mandos estatales para saquear a la institución.

Lo que sí entendí, es que así se diseñó el proceso que permitió a funcionarios de alto nivel burlarse de los sonorenses y estafarlos a través de sus onerosas pensiones que reciben pese a su escaso tiempo laborado.

Hace unos días, el Gobernador Alfonso Durazo informó la ruta crítica para rescatar a la noble institución y habló de monopolio en los servicios que la institución subroga a particulares. Ya se sabía, pero volvió a ejemplificar con el servicio de imagenología, que se cobraba caro y solo se recibía el 30% de lo pagado.

Mientras se sabe el  nombre de la empresa, dueños y demás beneficiarios del dinero estafado a los sonorenses, se suspendió la relación con esa firma y ya con tratan a otras más baratas y eficientes.

Eso reducirá las pillerías institucionalizadas y abatirá el nivel de corrupción al que llegó Sonora. Y más aún, el gobernador también pondrá fin a la discrecionalidad irresponsable de las atribuciones que la ley permite a quienes ocupan ese cargo, como eso de regalar las notarías públicas a los políticos cuatachos y otra, o pensionarlos sin cumplir requisitos

Es que en eso de las pensiones, Jesús Manuel Acuña Méndez, director del ISSSTESON explicó el modus operandi para desviar “miles de millones” a… ¿dónde… a qué bolsillo o bolsillos?

Se sabrá en cuanto aclaren esa triangulación que apenas llega a funcionarios que iniciaron en el sexenio de Claudia Pavlovich, quienes se coludieron con funcionarios en activo para preparar demandas en complicidad con miembros del Tribunal de Justicia Administrativa y así nacieron las pensiones elevadas.

Ahora me explican abogados y leo a columnistas observando que “lo que Acuña Méndez quiso decir…”, es que fueron leperadas lo que hizo ricos a muchos, vía el fraude a los derechohabientes.

Así que, lo más obvio, fue ir a revisar complicidades en el Tribunal de Justicia Administrativa y la reacción puso a temblar a todos. Y de patitas en la calle al titular, el empalmense Aldo Padilla.

Desde mediados de la semana pasada se reunieron los magistrados a puerta cerrada y, había quedado claro que Padilla ya no era presidente de ese tribunal. A cambio, no se hablaría de cómo habría acumulado insultante riqueza y del influyentismo para acomodar a amigos y familiares en puestos bien  remunerados de la burocracia estatal. Incluso del intento de pensionar a una de sus hermanas, quien reclamó ese beneficio por un accidente de trabajo que los propios empleados del ISSSTESON desmintieron y la farsa se confirmó, así que adiós pensión.

Todo esto desencadena vientos tempestuosos en los juzgados de Sonora, sobre todo en Cajeme, donde estalló un movimiento acusando corrupción de jueces, secretarios o escribientes. No tardan los cambios.

Esa corrupción en la impartición de la justicia permea hasta Guaymas, donde el abogado debe aprender procedimientos ajenos a la teoría de la ley, pero señalarlo es complicarse la vida, como me responde uno de ellos: “Porque si así, traigo un recurso “perdido”, imagínate…”.

Sí, me imagino. Pero por si la duda persiste, así epiloga la exposición: “Pero sí, hay mucha corrupción ahí, en Obregón”.

En cuanto a Guaymas, “es mi compa”. Es decir, ratifica que primero debe el abogado hacer “su compa” al encargado de administrar la impartición de justicia, o así le va.

El caso es, hay movimientos estatales que de entrada, parecen algo así como que quieren cambiar todo para que todo quede igual, pues habrían dejado en lugar de Aldo, a Sergio Encinas, lo cual no tendría nada de malo, excepto porque me lo describen como pieza del ex secretario de Seguridad Pública en Sonora, Adolfo García Morales, aquel que renunció para evitar ruido de la investigación en el gasto de recursos federales para combatir a la delincuencia en la entidad.

Si se trata de limpiar tribunales, Encinas no sería el personaje adecuado, por su antecedente de muchos “recomendados” y asesorar sindicatos que llevan casos en el Tribunal. Se lama conflicto de intereses.

Más aún, debe clarificarse el interés de cada uno de los magistrados, pues hay padrecistas que responden más a esos intereses que a los de la justicia, como hay quienes habrían llegado “por méritos en campaña” de sus cercanos, algunos de ellos dirigentes políticos u operadores electorales (sí, así les dicen, mapaches) que fortalecieron los cimientos priístas del sexenio de 30 años (bueno, 24, se aclaró) que vivió Sonora, como Roberto Sánchez o Ambrosio Escalante, por citar solo dos ejemplos.

Se supone que todos están en la mira y los cambios ya comenzaron, pero este lunes se confirmaría con nuevos nombres y, con ellos, las nuevas formas para corregir la crítica general de que en Sonora, la justicia “se volvió, lenta, sesgada, corrupta y muy cara para las arcas estatales”.

NUEVOS AIRES GUAYMENSES

Ya se nota el cambio en Guaymas. Escucho y leo comentarios alusivos al tema pero reproduzco este que hace el periodista hermosillense Francisco Rodríguez, que lo resume todo:

“Observo mucha actividad social, cultural, económica, con este nuevo gobierno municipal. Bien por Guaymas y su gente”.

Cierto. Y aprovecho para felicitar a la alcaldesa Karla Córdova por renovar con el pie derecho la convivencia de los guaymenses, con un Festival de la Calaca, alusivo a estas fechas, que reunió a mucha gente y la vistosidad del evento se reconoce en el plano estatal.