+ AMLO y el Covid que solo le da “a los malos”; se expande el virus, pero sin la letalidad del primero; los 943 MDP de Conagua; Estado y Asipona rehabilitarán la Serdán y el Porfirio Hernández; Sandra Luz y Heriberto confirman grandes obras, incluyendo el nuevo hospital del IMSS
GUAYMAS, Son.- Imagínese, el presidente López Obrador hablando en medio de comunicadores, enfermo de nariz y garganta --leves, dijo, pero enfermo, al fin.
Se le sugirió guardar cama, pues podría ser coronavirus. Lo fue. Por segunda vez.
Ya guarda cama y ahora se esperan brotes entre quienes le han acompañado en sus mañaneras y entre sus colaboradores desde el nivel secretarial con quienes se ha reunido, en todos los casos, sin tapabocas de por medio, pues el presidente no los usa.
El jefe del Ejecutivo federal también debe explicar cómo está eso de que el Covid, solo pega a los que traicionan, son corruptos y mentirosos.
El punto es que, el Covid, vuelve a ser el tema central del país al subirnos a la cuarta ola, cuya cresta no alcanzamos aún y ya implantamos nuevos récords cada día.
Hasta se piensa en confinamientos, ante tantos casos que involucran a todos. La noticia menos mala del virus, es que pese a su más rápida propagación, no es tan letal como su primera manifestación.
En Sonora, preocupa. Lo confirmé este martes, en Hermosillo, en el encuentro semanal del gobernador Alfonso Durazo con la prensa, realizado no en el espacio de siempre, sino en el amplio patio central del Palacio de Gobierno, con sana distancia y cubrebocas, doble en muchos casos.
De la conferencia tradicional resaltó, como siempre, lo informado que está el gobernador y su capacidad de detallar cada tema.
Había tono de cordial reproche al citar que no le dimos vuelo, por eso pasó casi desapercibido, el convenio signado con Comisión Nacional del Agua, donde el organismo se obliga a invertir 943 millones de pesos en infraestructura hidroagrícola, agua potable, alcantarillado, saneamiento y cultura del agua.
Junto al titular de Conagua, Germán Arturo Martínez, Durazo explicó la importancia del convenio y que, con el recurso contemplado y “administrado con austeridad, transparencia y honestidad, podremos hacer maravillas en beneficio de las y los sonorenses”.
Lo subrayó con la emoción del gran logro, que incluye más y mejor infraestructura en zonas urbanas y rurales. Ah, y hacer más eficientes los organismos operadores locales. Eso es música para Guaymas.
También tocó, el mandatario, eso del ahorro al concentrar en edificios de gobierno dependencias que operan en espacios rentados. Alcanza un millón de pesos mensuales y se suman a otros rubros en el mismo proceso de austeridad con el que, en el año, se ahorrarán 5 mil 300 millones.
Añadió el rediseño informativo de Telemax, la televisora estatal –de todos, no de unos cuantos—, para que “sirva al fortalecimiento de sus valores; nada de estar destinados al desprestigio de adversarios, a lastimar reputaciones de la gente”.
Y habló el titular de Salud, José Luis Alomía, sobre el Covid: son ciertos los efectos de la pandemia en Sonora, creciendo y abundante en contagios, pero dicha escalada no se refleja en hospitalizaciones ni en ocupación de más espacios destinados para pacientes graves.
Magnífica noticia, pero el facultativo llamó a la población a no bajar la guardia, a seguir con las medidas sanitarias. No se oyó como exigencia, pero sugirió comenzar a reducir aforos al 60% en lugares públicos.
Deberíamos hacerle caso. Al ritmo en marcha, seguirán elevándose los casos, pero con el debido cuidado, pronto podremos reducirlos.
GUAYMAS: MUCHA OBRA A CORTO PLAZO
En breve iniciarán grandes obras por todo Guaymas.
El gobernador las anunció cuando confirmaba la modernización del puerto marítimo comercial de altura, pero no le hemos entendido del todo cuando rechaza la transformación sin mejoría para todos. Así, mire lo que escuché este martes:
La inversión local comenzará a transformar la ciudad y encausarla al futuro, rehabilitando a base de concreto hidráulico de la avenida Serdán desde el obelisco a los Héroes del 13 de Julio –confluencia con la calzada Agustín García López— hasta la calle 29; desde allí y hasta el acceso sur que recorre el bulevar Porfirio Hernández, se hará cargo la Administración Integral de Guaymas, la antigua APIGUAY, que hoy se llama Administración del Sistema Portuario Nacional Guaymas, o ASIPONA, raro término al cual pronto nos acostumbraremos.
Cada parte invertirá unos 130 millones de pesos. A eso seguirán muchas obras cuya definición camina, junto con la programación del gasto.
Quise más datos y la oportunidad cayó del cielo, cuando coincidí en conocido comedor capitalino --de nombre muy ad hoc, “Los grillos”--, con el secretario de Infraestructura Urbana, Heriberto Aguilar, y la diputada federal Sandra Navarro. Me confirman estas y muchas gestiones más.
O sea, me quedé corto. Pero hice alusión al nuevo hospital del IMSS y están muy optimistas, pues ya está el dinero etiquetado, el proyecto y hasta el esperado terreno que donó el empresario guaymense Francisco Uribe, así que poco falta para comenzar a edificar las instalaciones que hace dos años costaban 1,600 millones de pesos.
Concretamente, resta entregarle al IMSS las escrituras de 45 mil metros cuadrados, y eso ya está en manos de la alcaldesa Karla Córdova, quien no deja de picar piedra sobre ese y otros temas de infraestructura. Ya le pidió a Sindicatura acelerar el paso y puso a prueba al síndico Carlos Alberto Burrola Córdova, quien no termina de entenderle a su chamba pero aprende rápido, pues está rodeado de gente capaz en esa oficina.