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Estas líneas...

+ Un Juzgado que no interpreta la ley; tanto esfuerzo del STJE, para nada; Canaán arregló el problema con el Bebo, no con las casetas; Guaymas bajo fuego; Diconsa, la buena noticia; agradece Durazo al Congreso a través de Sebastián


GUAYMAS, Son.- La autoridad judicial en Sonora hace esfuerzos para limpiar impurezas en sus juzgados, pero algunos (¿muchos?) de sus impartidores de justicia parecen no compartir esa buena intención.

Aquí, en el Juzgado de Primera Instancia de lo Familiar, cuya titular es Cassia Goretti Navarro desde marzo (la segunda desde que Rafael Acuña administra la justicia en Sonora) tiene ejemplos de juicios en entredicho. Uno de ellos involucra a un menor sobre quien persiste el riesgo de afectación a su libre personalidad y sano crecimiento espiritual y sicológico.

Es principal afectado en un juicio de separación de pareja donde el varón decidió su adopción y hoy intenta desconocerla, como si el jovencito fuese culpable de lo que ocurre.

El marco constitucional actual le tiene muchas consideraciones al principio fundamental de protección al menor, por eso sorprende que un juzgado cuya función básica es el interés familiar, no responda a dicho principio analizando el vínculo afectivo que existe entre él y sus padres que, de ninguna forma, debe flagelarse ante el riesgo implícito.

La profesional del derecho contratada por don Rafael para ocupar esta oficina en el bonito edificio de calle 11 y avenida 9, parece muy “tradicional” en su actuación y podría no haber leído sobre juicios abreviados y participación de menores para resolver situaciones que los involucran.

No escucha al menor, apelando a reglas tradicionales cuando todo ahora exige modernizar la atención a los demandantes de justicia; no ha nombrado un tutor como es obligado por la Ley según el Artículo 323 que, para hacernos bolas, dice: “En todos los casos en que las personas que ejercen la patria potestad tengan un interés opuesto ante los hijos, estos serán representados en juicio y fuera de él por un tutor nombrado por el juez para cada caso”.

Aunque la vulneración a un derecho está presente, no fue útil acudir a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, pues al pedir apoyo el menor a la instancia estatal (de pilón tiene que contratar un abogado y elaborar papeleo, como si fueran tan baratos), sufrió otra desilusión.

No pueden acompañarlo a revisar su caso “por cuestiones jurisdiccionales”, le dijo el visitador general Gerardo Gastélum, y lo remitió a la oficina de la CEDH en Guaymas donde, sé que usted lo creerá fácilmente, su titular es el único personal.

Así no se puede modernizar la ley. Y así no debe ser una herramienta para aplicarla.

Tanto dinero invertido por la Corte debiera significar mejor resultado en actitud de jueces y aplicación de protocolos. También cuestionable la respuesta de la Comisión que debe velar por los derechos fundamentales, al abandonar a quien creyó en quienes pregonan no callar y denunciar injusticias.

El estado de indefensión de un menor exige resultados y entre más pronto mejor, pues el futuro llega pronto.

Si hoy nos quejamos de tanto joven atrapado por las prácticas nocivas que lesionan a la sociedad, preguntémonos: ¿No sería por este tipo de actitudes en el pasado?

BAJO FUEGO

Ayer, mientras redactaba estas líneas, tenía el dato de 6 ejecuciones en Guaymas y 1 en Empalme. No había terminado el día, pero no quise dar seguimiento a la espiral violenta que nos tiene en zozobra.

BEBO VS CANAÁN PARTE II

Alfonso Canaán dice que su problema con Carlos Zataráin está resuelto, pues solo fueron “malentendidos”.

El titular de Organización Social en la Coordinación Estatal para la Concertación de la Obra Pública, dijo que se sentó con el titular, “El Bebo”, y todo se aclaró. El guaymense me confirmó la charla.

Lo celebro. No llegarían a nada enfrentándose y Canaán tiene mucho qué hacer para lograr que la autoridad nos explique por qué la carretera federal 15 tiene dueño a su paso por Sonora y ese dueño --6 o 7 conocidos políticos de los últimos 30 años—, son dueños de lo que Caminos y Puentes Federales (Capufe) nos cobra por usar los caminos que eran nuestros y nos los quitaron.

DICONSA, LA BUENA NOTICIA

El esquema manejado por la Compañía Nacional de Subsistencia Populares (Conasupo), al crear tiendas para distribuir básicos a bajo costo, volvió.

El lunes se inauguró en Guaymas una de esas tiendas (serán 15 en Sonora) y vinieron el gobernador Alfonso Durazo y Leonel Cota Montaño, director de Seguridad Alimentaria Mexicana. Celebró el esperado acontecimiento la alcaldesa Karla Córdova, quien se esforzó en la gestión, pues sintió el agobio del pueblo durante su campaña, que pedía apoyo incluso para sobrevivencia.

Qué cruel que un sistema político tenga a sus ciudadanos así.

La nueva tienda Bienestar Diconsa beneficiará a familias de 60 colonias en el norte de la ciudad. Que vengan muchas más con ese esquema de abasto comunitario. No son competencia para las grandes cadenas comerciales, a donde la gente común no acude pues su magro ingreso les impide ese privilegio.

BECAS, MEJOR QUE DESPILFARRO

En el lugar, el gobernador Durazo reconoció a los diputados locales dirigiéndose al guaymense Sebastián Orduño, y a Margarita Vélez, de Cajeme, por aprobar la reducción del gasto en el Congreso estatal hasta en un 50%, lo que hizo posible “el programa de becas más grande de la historia de Sonora”.

Por eso hoy se dispone de 400 millones de pesos que antes despilfarraban los legisladores y van directo a becas “para que ningún sonorense se quede sin estudiar”, explicó satisfecho el gobernador.