WASHINGTON, D.C., 2 de Noviembre de 2010.- El Partido Republicano se quedó con el control de la Cámara de Representantes al superar en la elección de hoy a los candidatos demócratas y conseguir al menos los 39 escaños requeridos para volverse mayoría.
Esa era la tendencia preliminar manejada por los más influyentes medios de comunicación de los Estados Unidos, que manejaban el historial de esa instancia en manos de los demócratas desde las elecciones legislativas de 2006, año en el que pusieron fin a su vez a 12 años de mandato republicano, sostenido hasta 2008.
NBC prevé que los conservadores obtengan en total 237 escaños y los demócratas 198, pronóstico cuyo margen de error significaría 13 escaños. Es decir, la ventaja es inobjetable.
A las 21 horas en esta capital las imágenes televisivas proyectaban triunfos republicanos en 79 escaños y 38 de los demócratas. La Cámara baja (diputados) tiene 435.
Una derrota que se le atribuye al propio presidente Barak Obama, es la del legislador de Virginia Tom Perriello, derrotado pese al claro respaldo recibido del primer mandatario.
Perriello obtuvo ese apoyo tras el que a su vez dio al paquete de estímulo económico y a la polémica reforma de salud de la administración de Obama. Su derrota fue ante el republicano Robert Hurt.
Al perderse el control demócrata en la Cámara de Representantes, debe salir la actual presidenta, Nancy Pelosi, quien sin embargo manifestaba optimismo esta noche por los resultados. Pero la tendencia dice lo contrario y la sustituiría el actual líder republicano en la Cámara, John Boehner.