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"Ventanean" al premier chino

+ Le adjudican fortuna de 2 mil 700 MDD y China se indigna

          BEIJING, China, Sábado 27 de octubre de 2012.- La familia del primer ministro de China, Wen Jiabao, sería dueña de al menos 2 mil 700 millones de dólares, según el artículo divulgado hoy por el diario estadounidense The New York Times.

La aseveración provocó una furiosa reacción del gobierno chino, que acusó al rotativo de querer “ensuciar la imagen de China por motivos ocultos”, luego de la publicación donde el rotativo expone que “muchos parientes de Wen Jiabao, incluyendo a su hijo, su hija, su hermano menor y su cuñado, se han vuelto extraordinariamente ricos durante su mandato”.

“Una revisión de los datos empresariales y regulatorios indica que los familiares del primer ministro, algunos de los cuales tienen una habilidad especial para los acuerdos de negocios agresivos, entre ellos su esposa, controlan un patrimonio de 2 mil 700 millones de dólares”, cita el artículo del Times.

Wen dejará el cargo en el cercano XVIII Congreso del Partido Comunista chino el 8 de noviembre, aún cuando los analistas políticos afirman que seguirá siendo una figura influyente.

En la descripción del NYT señala que esta fortuna y las inversiones familiares están articuladas a través de una compleja red de nombres falsos y de la asistencia de amigos y familiares lejanos.

La madre de Wen Jiabao, de 90 años, ha invertido por ejemplo, 120 millones de dólares desde hace 5 años en activos financieros. La familia controla empresas turísticas, joyería, bancos,  telecomunicaciones y empresas de infraestructuras, usando en ocasiones empresas “off-shore”.

La reacción china fue inmediata señalando el vocero chino Hong Lei que “estos artículos difaman a China”. Los censores chinos bloquearon el acceso online al artículo y cortaron las noticias de canales de televisión extranjeros que tocaban el tema.

Hong declinó especificar en virtud de qué normativa las autoridades chinas decidieron bloquear el acceso a la web del diario estadounidense, al mismo tiempo que el gobierno chino inició una investigación criminal formal sobre Bo Xilai, prominente ex político que fue despojado de su poder por el Partido Comunista en medio de acusaciones de corrupción.