+ Es desproporcionada, sostiene un diario estadounidense NUEVA YORK, EU., 31 de Mayo de 2016.- México registra una tasa inusual de muertes a manos de las fuerzas armadas durante sus enfrentamientos, lo que indicaría la prácticade ejecuciones sumarias o violaciones a los derechos humanos, indica un artículo del diario New York Times.
El periódico acusa que las fuerzas armadas de México matan con una “eficiencia excepcional” a sus rivales y "apilan cadáveres a gran velocidad". La autoridades mexicanas, cita, indican que eso se debe a que los soldados están mejor entrenados y tienen más habilidades que los cárteles a los que combaten.
Expertos en el tema, dice el NYT, señalan que la tasa de muertes en enfrentamientos con el Ejército es inusual, lo que “revela algo mucho más oscuro” en este caso.
“Hay ejecuciones sumarias”, acusa Paul Chevigny, profesor jubilado de la Universidad de Nueva York, y pionero en el estudio sobre la letalidad en diferentes fuerzas armadas. Un estudio sobre las guerras desde finales de los años setenta, del Comité Internacional de la Cruz Roja, encontró que en la mayoría de los escenarios de combate entre grupos armados por cada persona muerta hay una media de cuatro heridos, a veces más.
Pero en México, "el Ejército mexicano mata a ocho enemigos por cada uno que hiere". En el caso de la Marina, la discrepancia es mayor: datos de esa fuerza armada señalan 30 combatientes muertos por cada uno que hiere. Las cifras las obtuvo el rotativo del documento “Índice de letalidad 2008-2014: Disminuyen los enfrentamientos, misma letalidad aumenta la opacidad”, publicado en junio de 2015 por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Autónoma de México (UNAM).
Desde 2014 el gobierno mexicano dejó de publicar los reportes de civiles o presuntos criminales, muertos en enfrentamientos con el Ejército, dice el diaio, pero los datos disponibles “ofrecen una imagen única sobre el papel que han asumido las fuerzas armadas mexicanas en la guerra contra el crimen organizado. Durante la última década, a medida que los marinos y soldados mexicanos han sido enviados a la línea de combate, las violaciones a los derechos humanos se han disparado”.
Aun así, criticó el NYT, “las fuerzas armadas continúan siendo intocables, protegidas por un gobierno reacio a imponerse sobre la única institución a la que puede enviar al combate”. Lo anterior, según el periódico, se puede afirmar porque “se han tomado muy pocos pasos para investigar las miles de acusaciones de tortura, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales que se han registrado desde que el entonces presidente Felipe Calderón declarara la guerra contra las drogas hace una década”.
Casos como el de Tlatlaya, según el periódico, quedaron en la impunidad con la liberación de todos los militares señalados por presuntas ejecuciones extrajudiciales. De las 4 mil denuncias por tortura revisadas por la Procuraduría General de la República (PGR) desde 2006, según el NYT, solo 15 han terminado con una condena.
Las fuerzas armadas de México, según el diario, no respondieron a solicitudes de entrevistas para dar su postura sobre las datos y aseveraciones de este artículo.