+ Los promotores tienen en la mira 300 MDD; ya vendieron 100% de entradas a la arena y de ocupación hotelera
LAS VEGAS, Nev., 4 de Mayo de 2017.- Los expertos le niegan notoriedad histórica, pero lo ven como un combate entre los dos boxeadores mexicanos más cotizados del momento, que dejarán millonarias utilidades a todos los involucradas para volverlo “el negocio del año”.
Con el retiro de Floyd Mayweather Junior y sus cuantiosos contratos con la cadena de televisión CBS y su subsidiaria Showtime --200 millones de dólares por 5 peleas--, el negocio queda en manos de Oscar de la Hoya, quien se apropia poco a poco del dinero que genera el boxeo y ya se le mira como el promotor más prolífico de todos los tiempos.
Por eso está involucrado su principal “producto”, el jalisciense Saúl Álvarez, a quien llevó a la cumbre y podría hacerlo también el rey del “pago por evento”, hoy el principal negocio del boxeo.
Mayweather, la más grande estrella del boxeo, “sufrió al hacer las cuentas con CBS”, revelan las crónicas. La televisora ganó un dineral en la pelea entre Álvarez y Mayweather, celebrada el 14 de septiembre del 2013, la cuarta en la secuencia del contrato del “Pretty Boy”, que vendió más de 2.2 millones de telehogares en los Estados Unidos y acumuló una recaudación superior a 150 millones de dólares principalmente con el mercado latino, que buscaba al sucesor de su más querido ídolo, el sonorense-sinaloense Julio César Chávez.
Álvarez parece ser el elegido. La marca de “pay-per-view” de 2.2 millones de tele-hogares, es la tercera venta más grande de la historia y la transmisión a más de 85 países del mundo no será fácil repetirla. La Cadena HBO transmitirá el evento y busca recaudar 100 millones de dólares entre 1.5 millones de telehogares en Estados Unidos, a lo cual debe agregar venta de derechos directos a 78 naciones en el mundo.
EL NEGOCIO
LAS VEGAS, Nevada.- HBO, Golden Boy Promotions y la Corporación MGM esperan hacer el gran negocio de todos aquellos en los que hayan participado, al poner la mira en una promoción que podría sumarles unos 300 millones de dólares, “aunque sólo la y tercera parte está directamente relacionada con el evento”.
En el encuentro boxístico de este fin de semana, que esperan en todo el mundo, Saúl “El canelo” Álvarez recibirá una bolsa de 18 millones de dólares garantizados; Chávez, 7 millones.
Álvarez recibirá 1 dólar cincuenta centavos de cada “pago por evento” vendido y espera que se vendan 2 millones de señales a telehogares, lo que elevaría su recaudación a 21 millones de dólares. Así, la bolsa total del “pelirrojo” se eleva, como la elevaría Chávez para completar ingresos por su participación, de unos 9 millones de dólares.
Esto, y los casi 30 millones de bolsa de garantía por intercambiar puñetazos, serán la cifra más alta que haya cobrado cualquier boxeador mexicano; Chávez Junior ganará más que la bolsa más grande cobrada por su padre, 7 millones de dólares, cuando se midió en revancha a Oscar de la Hoya, el 18 de septiembre de 1998.
MGM Corporation, dueña de la mercadotecnia de la pelea que incluye la taquilla de la T-Mobile Arena, el gran escenario del match,–donde caben 22 mil aficionados--, pagó 20 millones de dólares para obtener la sede del combate.
No se preocupa por cómo los recuperará, pues ya reporta ocupación total en propiedades del grupo como MGM Grand, Montecarlo Hotel and Casino, Mandalay Bay Hotel, The Hotel, New York New York, Excalibur, Luxor, The Mirage, The Bellaggio, además que espera cerca de 11 millones de dólares por entradas a la arena.
Se habla de apuestas, que se cruzarán hasta alcanzar unos 20 millones de dólares en el mercado legal en los casinos… pero los apostadores bostezan cuando se habla de este mercado y avivan su mirada cuando hablan de aquellas apuestas que nadie registra y que la Ley persigue, pues intercambiarían al menos 100 millones de dólares que se volverían legales.
Muralsonorense.com buscará opiniones de boxeadores que hablen de la pelea misma, de recursos técnicos y posibles resultados, pues el dinero es, en todos los medios, lo que más resaltan de la nueva pelea del siglo que pareciera estar lejos de la sola consideración como tal.