México, D. F., 29 agosto de 2012.- México ha tenido éxito en el incremento a la transparencia mediante la información pública y la comunicación electrónica dentro del gobierno y con los ciudadanos, destaca el Comité de Expertos en Administración Pública de Naciones Unidas.
Así lo establece el informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la “Reunión del Grupo de Expertos y Taller sobre desarrollo de Capacidades en la Prevención de la Corrupción en la Administración Pública”, elaborado por Meredith Edwards, relator general.
El documento agrega que el incremento de transparencia en México se logró también mediante la solicitud a las dependencias para identificar información que podría ser útil para el público, es decir, las prácticas de transparencia focalizada.
Otra acción que contribuyó al aumento de la transparencia, reporta, es el intercambio obligatorio de información entre diferentes dependencias, para limitar el número de veces que el ciudadano proporciona información o documentos, cuando realiza un trámite o solicita un servicio público.
El reporte contiene una serie de recomendaciones para mejorar el combate a la corrupción y, con ejemplos de las acciones de diversos países, destaca los resultados que se pueden obtener al aplicar dichas recomendaciones.
En particular, sobre la recomendación “Aumentar la eficacia de los acuerdos institucionales del sector público para la prevención de la corrupción y participación ciudadana en las iniciativas de combate a la corrupción” el reporte señala:
“Los debates que se generan sobre la necesidad de simplificar las regulaciones pueden conducir al mismo tiempo a la reducción de costos y a la reducción de la corrupción. Un ejemplo que se dio fue el de México, donde la cantidad de regulaciones recientemente fue reducida de 16,000 normas a 9 manuales”.
En el mismo apartado, el informe señala que durante la reunión y el taller los participantes expusieron que la corrupción es un fenómeno complejo que debe ser combatido con “un cóctel de medidas anticorrupción”.
Ante ello, el informe considera un hallazgo importante en este terreno el papel de la vergüenza pública –la sanción social– con la cual México difunde ante los medios de comunicación los casos de corrupción en los cuales están involucrados funcionarios públicos.
Cada país enfrenta circunstancias locales en el combate a la corrupción, reconoce el texto, por lo que sugiere acciones particulares como la que realizó nuestro país, en el sentido de enfocar las áreas de alto riesgo de corrupción para la contratación pública.
También subraya que México y otros países como Mauricio, Bután y Zambia tienen variantes de declaración de bienes. En ese sentido, recomienda que esta práctica tenga diferentes requisitos según sea el propósito: prevenir el conflicto de interés o detectar el enriquecimiento ilícito.
Sobre la recomendación “Desarrollo de capacidades de los recursos humanos en el sector público para prevenir la corrupción y participación ciudadana en las iniciativas de combate a la corrupción”, reporta que en lo relativo a las denuncias de irregularidades México permite el anonimato.
En ese sentido, el reporte de la ONU sugiere “sistemas desarrollados para permitir que los funcionarios honestos con conocimiento de actos de corrupción denuncien, sin exposición a los riesgos”.
Al desarrollar la recomendación referente a: “Rendición de cuentas a través de la transparencia participación ciudadana para prevenir la corrupción en el Sector Público a través de las TICs”, el documento recuerda que México recibió en 2011 el Premio al Servicio Público por el concurso “El Trámite Más Inútil”.
Al respecto, reitera que las denuncias públicas en México son una parte importante del “cóctel” de medidas anticorrupción; y destaca que en nuestro país se ha realizado una estrategia de capacitación necesaria para el sector privado, en materia de contratación pública.
El informe de Naciones Unidas –que incluye prácticas exitosas de Uganda, Bolivia, Georgia, Ecuador, China, Kenia, Corea, Zambia, Australia, Estados Unidos, Kenia, Nigeria, Filipinas, India, y Turquía– advierte en sus conclusiones que la participación ciudadana y la rendición de cuentas no son suficientes, por sí solas, para el control efectivo de la corrupción.
Además, sugiere el establecimiento de un centro de intercambio de aplicaciones de todo el mundo, administrado por la ONU, y señala que, por ejemplo, la Alianza para el Gobierno Abierto es un punto de encuentro para compartir conocimiento y aprender los unos de los otros.
La “Reunión del Grupo de Expertos y Taller sobre desarrollo de Capacidades en la Prevención de la Corrupción en la Administración Pública”, a la que asistieron ministros y delegados de diversos países, se realizó en junio pasado, en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.