+ Pascual no fue discreto y criticó a las fuerzas armadas, según Wikileaks
WASHINGTON, D.C., 3 de Marzo de 2011.- Debido a la tensión que generaron entre Estados Unidos y México las revelaciones de WikiLeaks, presidente Felipe Calderón sugirió que podría dejar de trabajar con el embajador Carlos Pascual.
Reunido con integrantes del `staff´ del rotativo The Washington Post sobre si ha perdido confianza en el diplomático estadounidense, Calderón Hinojosa dijo que la confianza "es algo difícil de construir y muy fácil de perder".
¿Seguirá trabajando con el embajador?, le preguntaron al mandatario.
"Es algo que puedo platicar con el presidente Obama", respondió.
Enfatizó sobre el cable diplomático en el que el embajador Pascual señala que los elementos del Ejército mexicano son lentos, mal preparados y tienen aversión al riesgo y opinó que "es difícil cuando ves el coraje del Ejército. Por ejemplo, ellos han perdido probablemente 300 soldados... y de pronto alguien en la embajada americana dice que no son lo suficientemente valientes".
Estados Unidos decidió entrar al juego de decir que ellos (el Ejército mexicano y la Marina) no están bien coordinados, "y de repente le comienzan a dar información a una agencia y no a la otra e intentan hacerlos competir".
"Tenemos una expresión en México, que dice ‘No me ayudes, Compadre'", comentó Calderón a los periodistas, en referencia a las comunicaciones entre la embajada de Estados Unidos en el país y Washington, al parecer por la referencia al cable en el que se revela que agencias estadounidenses entregaron información de inteligencia a la Armada de México que derivó en el abatimiento del narcotraficante Arturo Beltrán Leyva en la ciudad de Cuernavaca, lo cual fue rechazado por el Ejército mexicano.
La relación entre México y Estados Unidos se vio "severamente dañada" a raíz de las filtraciones de WikiLeaks, mandatario.