MORELIA, Mich., 2 de Agosto 2016.- Diez personas fueron halladas calcinadas en Michoacán, en el occidente de México, y habrían sido asesinadas por el alcalde del municipio de Álvaro Obregón, quien buscaba evitar que un cártel vendiera drogas al menudeo en su territorio, de acuerdo a una versión del gobernador estatal.
El alcalde Juan Carlos Arreygue fue detenido junto con cuatro policías locales, entre ellos un mando superior, en relación a al crimen y en sus declaraciones, los uniformados señalaron "como probable responsable al alcalde", de acuerdo a la versión que divulgó la emisión de Radio Imagen en entrevista al gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles.
Presuntamente los fallecidos pertenecían a una banda dedicada a "la venta de droga al menudeo, el llamado 'narcomenudeo', y había rivalidad incluso por diferencias con algunos familiares del propio alcalde", dijo Aureoles.
Esa banda buscaba distribuir droga en Álvaro Obregón, "lo cual el alcalde había determinado que no les iba a permitir", añadió, pero las autoridades no han determinado si Arreygue defendía su propia plaza de venta de droga. El gobernador cita que había sido investigado por agentes de inteligencia antes de su investidura como alcalde y "había varias referencias de su vínculo" con líderes de Los Caballeros Templarios, un cártel hoy desmantelado que asoló por años a Michoacán.
El caso inició cuando el pasado viernes varias personas que se encontraban en un pequeño comercio en los límites de los municipios de Cuitzeo y Indaparapeo fueron arrestadas por policías de Álvaro Obregón, sometidos y obligados a subir a una camioneta. Al día siguiente los hallaron sin vida y calcinados en el vehículo en el que se los llevaron, cerca de Cuitzeo, dijo la fiscalía.
"El alcalde habría dado de manera directa la instrucción y les había entregado además un arma (...) para que después se cometiera este múltiple asesinato", dijo Aureoles. Entre las víctimas hay un empleado de la alcaldía de Álvaro Obregón y habría tenido diferencias de carácter personal con Arreygue.
Otro punto que llama la atención además de la brutalidad y magnitud del crimen, es que los casos de civiles capturados por policías para después ser asesinados vuelve a presentarse, luego de los escándalos en otros puntos de México en los últimos años. Entro ellos es mundialmente conocido caso de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, en Guerrero, vecino de Michoacán.