CD. DE MEXICO, 29 de marzo de 2012.- La Secretaría de la Defensa Nacional reportó aumento en el uso de aviones ligeros para el trasiego de estupefacientes de México a Estados Unidos.
De acuerdo al periódico Milenio, mientras en 2010 fueron decomisadas tres aeronaves ligeras al crimen organizado, en 2011 la cifra se elevó a 11. El mayor uso de este tipo de transportes se dio en la franja fronteriza que comprenden los estados de Sonora y Baja California, dijo la Sedena.
El reporte fue publicado en su revista electrónica La Gran Fuerza de México. El aumento en el uso de estas aeronaves se debe a que, frente a los cada vez mayores controles, los criminales se valen de estos vehículos aprovechándose de la dificultad para ser detectados.
El teniente de infantería Alfredo Arias Ruiz, dice Milenio, explicó que la dificultad para detectar este tipo de aviones se debe a sus dimensiones y estructura tubular, pues se elevan a una altura de 300 metros sobre el terreno, y sus hábiles pilotos aprovechan la escasa luz para maniobrar.
El funcionario informó que los aparatos pueden aterrizar en pistas de 50 a 100 metros y de poca preparación, dependiendo de las habilidades del piloto. Además presentan bajo consumo de combustible y considerados aeronaves muy seguras por su baja velocidad de vuelo y aterrizaje.
Sedena dijo que los aparatos deben tener un registro ante la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, además de certificados de aeronavegabilidad y de matrícula; los pilotos deben contar con licencia, que obtienen tras aprobar un examen ante la Dirección General de Aeronáutica Civil.