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Slim dice era caprichoso, pero ya no

+ Abrirá este martes su magnífico museo en el DF

          CIUDAD DE MÉXICO, 28 de marzo.- El empresario mexicano Carlos Slim dijo hoy que ha dejado de ser caprichoso y no le quita el sueño sumar alguna otra pieza de arte a su colección, de unas 66 mil obras de artistas latinoamericanos y europeos.

"No hay ninguna otra pieza que me quite el sueño, he dejado de ser caprichoso, lo fui cuando niño pero ya no", dijo en rueda de prensa el hombre más rico del mundo

Conversó hoy con medios por la apertura del nuevo Museo Soumaya, que se dará mañana al público, aunque a principios de marzo fue formalmente inaugurado con la presencia del presidente de México, Felipe Calderón, el escritor colombiano Gabriel García Márquez y el ex presentador de CNN Larry King, entre otras personalidades.

"Deseo que el museo forme capital humano, pues para ello no sólo son necesarios la información y los estudios, sino también el desarrollo de una mayor sensibilidad e interés por el arte", comentó Slim al respecto.

Fue su esposa Soumaya Domit, fallecida en 1999, quien lo inspiró a coleccionar obras de arte, después de sus recorridos por museos del mundo, y por ese motivo puso su nombre al recinto.

"Agradezco a todos los que formaron parte de este gran esfuerzo y me enorgullezco al decir que es 100% hecho por manos mexicanas", indicó Slim en el museo creado en un edificio edificio de estructura cuya fachada es cubierta por 16 mil espejos, diseño del arquitecto mexicano Fernando Romero, yerno del magnate, donde hay 6 mil metros cuadrados para exposición divididos en seis niveles.

Allí hay obras de Picasso, Rodin, Dalí, El Greco, Rubens, Murillo, Rubens, Cranach, Brueghel, Tiziano, Tintoretto, así como Van Gogh, Tolouse-Lautrec, Rouault, Matisse, Miró, entre otros.

Hay de artistas mexicanos novohispanos y del México independiente, como los lienzos religiosos de José de Páez, Miguel Cabrera, de los paisajistas José Juárez y Miguel Herrera, y los retratistas José Agustín Arrieta y Hermenegildo Bustos.

Del siglo XX los muralistas Diego Rivera, Clemente Orozco y Rufino Tamayo, y contemporáneos como Soriano, Cuevas y Toledo.

Pero también se exhiben textiles, moda, fotografía, cerámica, monedas, medallas, retratos en miniatura y relicarios, que enriquecen la visión de antiguas formas de vida.

Destaca un conjunto inédito de 2,000 monedas de oro virreinales y un millar de plata del segundo imperio mexicano (1863-1867) que encabezó Maximiliano de Habsgurgo, la mayor colección de monedas de los siglos XVIII y XIX.

El museo tiene un auditorio para 350 personas, biblioteca, cafetería y 2 mil 500 metros de almacén.