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Año de Hidalgo entre los diputados

CD. DE MEXICO.- Así como en el gobierno federal se están aprovechando las últimas horas del sexenio para hacer fechorías, como el caso del retiro de la concesión de la banda ancha a MVS por cuestiones de contentillo del gobierno Calderonista, en la Cámara de Diputados también.

Resulta que la comisión de Vigilancia de la Auditoria Superior de la Federación que preside la diputada del PRD, Esthela Damián,  pasó a los integrantes de esta comisión un oficio a firmar, sin decir más que lo que establece el documento.

Se trata de un Acuerdo –sin acuerdo—para que sea aprobado un presupuesto por 83 millones de pesos a la Unidad de Evaluación y Control de la Cámara de Diputados para el ejercicio fiscal 2013.

El documento cuenta con dos firmas de un total de 26. Lo firmaron ya dos diputados perredistas Julián Velázquez y Ramón Jiménez; faltan por firmar los priistas Marcela Guerra, Sebastián Lerdo de Tejada y en general 10 priistas más; 7 panistas, 3 del PRD y un legislador por el PT, MC, NA y PVEM.

El caso lo denunció el diputado Mario Di Constanzo, del PT, integrante de la Comisión, quien entregó la copia del Acuerdo a los representantes de los medios de comunicación a fin de evitar el albazo.

Aunque está por verse que eso suceda, pues en las últimas horas de la legislatura en la Cámara de Diputados también se están poniendo muy abusados los representantes sociales para llevarse lo que más se pueda.

De ahí que se ordenaran trabajos extraordinarios en las últimas horas de la legislatura como la remodelación del tablero electrónico, cuyo costo es de 92 millones de pesos; en cuyas obras, se dice, los integrantes de la Junta de Coordinación Política, responsables de palomear las mismas, se llevan el 10 por ciento del total de las obras; como parte de un acuerdo no escrito entre estos.

Niegan finiquito de 2 millones

La presidenta de la Junta de Coordinación Política, Mary Thelma Guajardo, negó que los diputados vayan a recibir casi dos millones de pesos por concepto de finiquito. Dijo que a los legisladores no se les finiquita; éstos sólo recibirán su sueldo y otros recursos por concepto de gastos de transporte y gestoría, lo que marca la ley; además del monto de aportación a la caja de ahorros.

Lo que no reconoció la legisladora perredista es que la ley ha sido creada a modo por los diputados y senadores a fin de beneficiarse durante, en medio y al final de cada legislatura, con recursos que representan una grosería ante la pobreza que se vive en el país.

Porque aunque por otros conceptos, sin que se llame finiquito, los 500 diputados federales que finalizaron su encargo popular este 31 de agosto, recibirán esa cantidad de entre un millón y medio y dos millones por haber concluido la legislatura.

El registro de los diputados

En la Cámara de Diputados se trabaja a marchas forzadas para que a partir de este lunes  los 500 diputados federales electos lleguen a las instalaciones del Palacio Legislativo de San Lázaro y realicen los trámites de su registro correspondiente.

Se tomarán la foto y se les entregará la credencial que los acredita como representantes populares electos y portadores del fuero constitucional.

Pues como lo marca la ley, los diputados, lo mismo que Senadores y algunos servidores públicos, tienen derecho al fuero constitucional; una figura jurídica que los protege básicamente en dos aspectos.

Para que la autoridad policiaca o judicial no los someta a proceso penal en caso de que éstos hubiesen incurrido en algún presunto delito. A la vez, los poderes el poder ejecutivo tampoco debe interrumpir sus labores.

Para ello, antes el pleno de la Cámara de Diputados debe “desaforarlos”.

El desafuero de Godoy Toscano

Recordemos que en esta legislatura LXI que está por concluir hubo un caso de desafuero, el del diputado michoacano Julio César Toscano Godoy, medio hermano del gobernador Leonel Godoy; quien fue acusado de tener nexos con el narcotráfico.

Y en sesión, el pleno cameral le retiró el fuero para que pudiera ser investigado por las autoridades correspondientes. Claro que para este punto, el legislador Godoy ¡ya se había dado a la fuga!