+ Maestros en tareas no educativas cuestan 65 veces el Programa Nacional de Lectura
CD DE MÉXICO.- Los 45 mil 753 profesores comisionados a tareas sindicales o administrativas costaron al erario mil 727 millones 767 mil pesos durante el año pasado, reveló Mexicanos Primero.
De acuerdo con un análisis de la asociación civil, presentado en el marco de su campaña ¡Fin al abuso!, el presupuesto para pagar a los profesores que realizan tareas ajenas a la enseñanza equivale 65 veces el Programa Nacional de Lectura, 17.8 veces el Programa para el Fortalecimiento de la Calidad de las Escuelas Normales y 11 veces el programa de Fortalecimiento del Servicio en la Educación Telesecundaria.
El presidente de Mexicanos Primero, Claudio X. González, exigió al Congreso de la Unión —que apenas se instaló ayer— prohibir “de manera explícita” en el presupuesto federal de 2013 el pago a maestros en comisiones no educativas.
La asociación advierte que hay maestros fuera de clase que ganan más de 110 mil pesos al mes, mientras el promedio que sí da clases recibe diez mil pesos.
Cuestan mil 727 mdp docentes en comisión
Mexicanos Primero denuncia el alto costo social que tiene la ausencia del aula de estos maestros.
El pago a maestros comisionados durante 2011 costó mil 727 millones 767 mil pesos del erario federal, de acuerdo con análisis elaborados por la asociación Mexicanos Primero.
En tanto, en el primer trimestre de 2012 sumaron 45 mil 753 docentes fuera de las aulas, de los cuales casi la mitad, 22 mil 353, fueron profesores comisionados a labores sindicales, quienes representaron un gasto a la Federación de 383 millones 747 mil 78 pesos, por lo cual la agrupación exige la prohibición del pago de comisiones no educativas, sobre todo aquellas relacionadas con actividades sindicales.
Los más de 22 mil 300 comisionados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) equivalen a toda la plantilla de personal de la Semarnat, de la PGR o de la Sagarpa.
Durante la presentación de la campaña ¡Fin al abuso!, Mexicanos Primero reveló que esos más de mil 700 millones de pesos gastados en maestros comisionados equivalen a 65 veces el costo del Programa Nacional de Lectura; a 17.8 veces el Programa para el Fortalecimiento de la Calidad de las Escuelas Normales; a 11 veces el programa de Fortalecimiento del Servicio en la Educación Telesecundaria, y a seis veces el Programa de Mejoramiento Institucional de las Escuelas Normales Públicas.
Ante el alto costo que representó en 2011 el pago a profesores que no dieron clases y tuvieron funciones sindicales o administrativas, el presidente de Mexicanos Primero, Claudio X. González, exigió al próximo Congreso y al siguiente Ejecutivo federal prohibir “de manera explícita” en el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2013 el pago de comisiones no educativas, especialmente las relacionadas con actividades sindicales.
Las investigaciones de esta agrupación, con base en los datos proporcionados por la SEP en el Registro Nacional de Alumnos, Maestros y Escuelas muestran tres tipos de comisionados: los que cumplen actividades para el sindicato, los que piden licencias sindicales y quienes laboran en oficinas del SNTE, conocidas como “centros virtuales”, donde se registra personal comisionado al sindicato.
“Ante este agravio tan evidente a la hacienda pública y a todos los mexicanos, nosotros tenemos una propuesta: Fin al abuso, fin a las comisiones sindicales”, pues es una “cantidad catastrófica”, señaló Claudio X González.
En su oportunidad, David Calderón, director de Mexicanos Primero, aclaró que de los más de 45 mil comisionados detectados en el primer trimestre de 2012, al menos la mitad son docentes pagados con dinero de los mexicanos y eso “claramente es una irregularidad grave, un abuso”.
Las estimaciones de la asociación civil apuntan a que hay comisionados sindicales que ganan mensualmente más de 110 mil pesos, mientras que el promedio de los docentes que sí están en las aulas reciben un salario de 10 mil pesos; significa que quienes sin dar clases desempeñan funciones sindicales reciben 11 veces el salario de los que sí dan clases, lo cual equivale a 100 mil pesos más que un profesor que sí cumple con su vocación de educar.
David Calderón aseveró que el costo social de los comisionados es muy alto, porque, poniendo un ejemplo, “el líder actual y el líder histórico de la sección sindical de Nayarit gana cada uno el equivalente a diez veces el salario típico de los maestros de esa entidad; es decir, entre los dos ganan como si fueran 20 profesores. Es claro que llevan décadas de no pisar un salón de clase y les seguimos pagando”.
Lo más grave es que ese dinero, que debería ser para la educación, se desvía para fines político electorales, pues “se utiliza para pagar a una organización territorial que el sindicato y sus secciones manipulan impunemente para cumplir con fines de poder y control”, lamentó Claudio X. González.
Según el artículo 86 de la Ley Federal de Trabajadores al Servicio del Estado, “las remuneraciones de los directivos y empleados del sindicato, así como el funcionamiento de éste, serán cubiertas por el mismo sindicato”.
Entidades desvían gasto educativo: ASF
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) informó que en una década, de 2000 a 2010, los estados desviaron 54 mil millones de pesos del gastos educativo, donde dos de cada diez pesos de esa cantidad no pudieron ser comprobados.
Además, 20.3% de tales recursos federales se destinaron al pago de maestros comisionados, apoyos y otros estímulos al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Lo anterior quiere decir que en diez años las entidades pagaron el salario de maestros comisionados y otros beneficios al gremio magisterial por un monto cercano a 11 mil millones de pesos con recursos del Fondo de Aportaciones para la Educación Básica y Normal (FAEB), que el gobierno federal transfiere por medio del Ramo 33.
Juan Manuel Portal Martínez, auditor superior de la Federación, informó que de esa década han realizado 136 auditorías al FAEB y, “de acuerdo con la experiencia fiscalizadora de la ASF, respecto de los recursos del FAEB, la calidad de su gestión, su transparencia y rendición de cuentas observan significativas insuficiencias, que afectan los logros educativos nacionales”.
De los 54 mil millones de pesos desviados, Portal Martínez aseveró que los estados no pudieron comprobar 21.2% de ese gasto educativo, mientras que 13.1% se utilizó en pagar a comisionados del SNTE y 7.2% fue usado para el pago de compensaciones y estímulos para las secciones sindicales de ese gremio.
Ante el mal uso del gasto educativo que transfiere la Federación a las entidades, David Calderón, director de Mexicanos Primero, señaló que se trata de “una de las grandes tragedias de la auditoría”, pues son pagos improcedentes.
Pero lo que más sorprende —apuntó en la presentación de la campaña ¡Fin al abuso!— es que los gobiernos de los estados devuelven a la Federación esos recursos mal utilizados, pero no se sabe de dónde los sacaron.
En tanto, el auditor superior de la Federación agregó que los millonarios recursos de ese fondo educativo mal usados representan un problema que se vincula a la ausencia de una normativa que debería establecer “de manera más clara y contundente” las consecuencias de tales desvíos.
“Sin la fiscalización superior, los criterios de transparencia, eficacia, eficiencia y economía en el gasto público corren el riesgo de ser remplazados por el clientelismo, la ganancia política y los intereses personales”, advirtió Portal Martínez.