Tener amigos cuenta

Miércoles 05 de Diciembre de 2012 16:02

Escrito por Agustín Rodríguez L.

GUAYMAS, Son.- Antonio Astiazarán es ubicado en un nivel atractivo al hablar de representatividad, por eso es que los guaymenses y creo que en todo el Distrito 04, se habla de él como un elemento valioso para Sonora.

Su manejo como persona y su capacidad de gestión le hacen volar alto, cuando se intenta evaluar el futuro a corto plazo del ex alcalde de Guaymas que nos trajo cruceros, nos construyó un gran malecón, una fuente danzante y mil cosas más, y hoy diputado federal que no tiene una puerta, sino muchas, abiertas en el plano político nacional.

Mire, en campaña, mucha gente le pidió centrar el tema de agua y saneamiento, eso que tan bien conoce por ejemplo el destacado científico local Guillermo Soberón.

Astiazarán fue por un experto, lo trajo del Estado de México, David Korenfeld, quien fuera titular de obras y agua de aquella entidad. Fue Guaymas el único Municipio visitado por el reconocido técnico, pues no todos los Municipios se interesaron en don David y tampoco tienen gente con la visión de este diputado.

Ahora, Korenfeld fue nombrado director de la Comisión Nacional del Agua. Eso es una gran noticia para el Distrito, y para Sonora, pues la relación del diputado nuestro hará concretar apoyos para obras planteadas durante su visita, como las plantas desaladora, la tratadora de aguas negras y el bordo de Ortiz que evite inundaciones a Empalme, por ejemplo.

Adicionalmente, debo decirle que Astiazarán tiene amigos en Comisión Federal de Electricidad, Secretarías de Turismo, Gobernación, Procuraduría General de la República y no crea usted exagerado cuando le digan que los tiene en el nivel de Secretario. Eso cuenta, sin duda, en política. Creo que vienen buenas cosas para Guaymas.

Devora se ha ido

John Swanson reunió gente de varios municipios con su buen poder de convocatoria, para exponer “La ruta del agua”, programa con el que ha quedado claro ya en 65 municipios que las obras del Sonora SI, son la solución para terminar con tanto problema por el agua en la entidad.

Gusta su forma de exponer. El jefe de la Oficina del Ejecutivo sabe hacerlo en forma clara y no es soso, que va. Sobre todo, sabe de qué se trata y lo dice de tal forma que al finalizar, quienes le escuchan, están convencidos del objetivo.

Añado solamente que el gobernador Guillermo Padrés ha logrado avances como el acueducto y aunque faltan muchas obras, lo principal ya está –y no hablo de la línea conductora de 150 kilómetros--: los pantalones para atender reclamos ciudadanos sin importante enfrentar el egoísmo y la necedad.

Dicho esto, me sumo al pesar por la última elección en la que participó Leonardo Dévora Gutiérrez, la definitiva, la que le quitó lo invicto. Era el te quedas o te vas, pero la larga y fructífera vida del reconocido priísta tenía que terminar, así que eso de que perdió no es del todo creíble, pues qué más tenía por hacer en este mundo.

Leonardo aprovechó el fin de semana para emprender el viaje eterno ante el pesar de sus familiares y amigos que lo recuerdan como buen funcionario y dirigente burócrata federal, promotor deportivo, dirigente del sector popular del PRI, y más como hábil artífice del triunfo de cuanto alcalde tricolor llegó entre mediados de los años 70 hasta los 90, viejo sabio cómo fue en el tema.

Descanse en paz.