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SUTSAG, la extorsión

GUAYMAS, Son.- Martín Ríos Enríquez creyó tener el poder para doblegar al Ayuntamiento, con su cargo de secretario del Sindicato de Trabajadores de la comuna, pero olvidó que ya no está frente a autoridades irresponsables e incapaces como las que trató hasta septiembre pasado.

Fue a Palacio Municipal, enseñó los colmillos y le advirtieron que los tiempos de la ilegalidad y la negligencia se habían ido. No lo creyó y tomó las armas, pero comienza a pagar las consecuencias.

Sus armas, válidas en la mentalidad descontonera de la improvisación a la que juegan rebasados ex priístas hoy pintados de azul –pintados, no azules--, son la amenaza, el plantón, el daño a la sociedad equiparable a extorsión, y por eso movieron mal sus fichas.

Crearon el caos. Desde la Canaco, hasta hoteleros y demás gente harta del radicalismo sustituto del cerebro, hicieron ver a don Martín su repudio a estas acciones. Váyase, le dijeron, a Palacio, y dialogue, no ataque a todos los guaymenses.

Si se analiza el fondo, los 60 días de aguinaldo que piden –de por sí 45 son muchos—saldrían del bolsillo de la gente, no de Otto Claussen o sus funcionarios, así que el pleito es contra todos y, todos, ahora cuestionan por qué no reducir también esa cifra ahora que Palacio cayó, financieramente hablando.

El señor Ríos debe ser honesto y recordar la jugarreta inventada con César Lizárraga cuando les pidió el voto para ganar la diputación local, negada por los guaymenses por causas sabidas.

En aquel mayo pasado sabían que no valía el acuerdo de elevar el aguinaldo, pero jugarían a que sí, pues finalmente con esos y otros votos caros que compraban con dinero ajeno, los cesaristas ganarían las elecciones y no habría obstáculo para cumplir… aunque Guaymas se fuera al precipicio.

Pero no. Los que se fueron, los que aplaudían desde el edificio azul de calle 20 y Serdán el plantón que afectaba a los guaymenses, tampoco cumplirían, pues en tal caso, lo habrían presupuestado en el documento aprobado por los 21 regidores en diciembre pasado. Si el tesorero y cómplices no lo hicieron, es que no pensaban pagar.

No brinquen pues, don Martín, en suelo parejo. La jugada quizá hubiese resultado, pero ni ganaron sus socios de entonces, ni dejaron dinero para eso, así que déjenos las calles libres para que los guaymenses y visitantes que ganamos 15 días de aguinaldo o trabajamos para pagarlos, podamos hacer nuestra tarea.

Nobleza obliga

El gobernador Guillermo Padrés reconoció a los diputados federales que hicieron posible atraer recursos importantes para Sonora, a todos, porque sin ver colores o siglas, hicieron equipo para jalar agua al molino de todos los sonorenses en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2013.

Buen ejemplo, quitarse los guantes y bajar del ring para buscar juntos causas comunes, que ahora significan obras y proyectos estratégicos muy importantes, donde Guaymas verá ampliado su puerto y nos traerán cruceros locales, pues también la construcción de un Home Port en Puerto Peñasco, significará la ansiada ruta que cada semana nos enviará un barco con viajeros de todo el mundo.

Coloquialmente, el gobernador dijo que “nuestros diputados se pusieron las pilas y lograron un gran presupuesto para Sonora”, así que a los sonorenses nos irá muy bien en 2013.

Por supuesto, la felicitación fue primero para los diputados del PAN, sus aliados, donde comenzó todo y todos salimos ganando. Guaymas, con 400 millones de pesos para ampliar el Puerto marítimo y en un descuido, más de 300 millones para infraestructura en todo el Municipio.