CD. DE MÉXICO, 19 de agosto de 2023.- El cambio climático también tiene consecuencias económicas, como lo refleja la sequía en la región del Canal de Panamá, donde hay menos agua por la falta de lluvias y eso obligó a restringir la navegación.
El impacto es tremendo, pues la ruta mueve el 6% del comercio mundial y, ante esto, en México se eleva el optimismo porque habría ya una alternativa con el viejo proyecto del corredor Transístmico.
La “sequía sin precedentes” que afecta el suministro de agua del Canal de Panamá obligó a imponer cargos por excedentes y límites de peso a las embarcaciones que cruzan del Océano Atlántico al Océano Pacífico, alterando la operación de las navieras para evitar retrasos, al descargar contenedores al inicio de su recorrido para navegar más “livianos” y reembarcan en la otra punta, lo cual eleva el costo del traslado pero no reciben cargos por excedentes.
La escasez de lluvias obligó al Canal a reducir su tránsito diario de embarcaciones a 32 cuando normalmente es de hasta 40, y el gobierno panameño mermó sus ingresos y aumentó el tiempo de transporte. Probablemente eso aumentará el costo del tráfico marítimo y eso golpeará también la economía de los consumidores.
El Canal necesita cerca de 200 millones de litros de agua dulce para cada paso de un barco, los cuales son elevados a 27 metros sobre el nivel del mar por un sistema de esclusas.
Esta situación de sequía en la región istmeña centroamericana también afecta a la mayoría de las naciones del mundo. El fenómeno climático podría prolongarse en caso extremo hasta un par de años, lo cual obligará a las empresas que utilizan este paso marítimo a buscar alternativas para transportar sus productos. Una de ellas es el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
MEXICO A LA VISTA
El corredor Transístmico en México es un proyecto de infraestructura férrea de 200 kilómetros de longitud aproximadamente, que conectará el Océano Pacífico (Salina Cruz, Oaxaca) y el Golfo de México (Coatzacoalcos, Veracruz), y cobra relevancia ante la situación del Canal de Panamá.
Hoy la especulación existente es si se beneficiaría México, explicando los expertos que no sería tanto como el canal, ya que la capacidad de transporte es mayor en la vía fluvial panameña, por donde una embarcación puede transportar de 20 mil a 24 mil contenedores, mientras el sistema ferroviario del corredor Transístmico solo llevaría en los trenes 50 contenedores.
Sin embargo, tendrá muchos beneficios para las empresas que se establezcan cerca de este importante proyecto del gobierno mexicano, por los tiempos y costos del traslado, que serán reducidos significativamente.
El primer efecto es que ayudará a México a potencializar la fuerza comercial que tiene, especialmente con los países miembros del T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá) firmado el 30 de noviembre del 2018.
La secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, ha dicho que el Producto Interno Bruto de México crecerá entre un 3 y un 5% por el impacto económico que tendrá el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, lo cual permitirá a México posicionarse como importante productor y abastecedor para su mercado interno y el estadounidense, pero también el de otras regiones.
COLOMBIA QUERÍA
En 2011, Colombia planteó la posibilidad de construir un ferrocarril transoceánico que cruzaría 220 kilómetros entre el Pacífico y el Caribe y trasladar más de 40 millones de toneladas de carga anual.
Una investigación confirmó el interés de China por abrir caminos alternos al paso panameño en Colombia, a un costo total de 7,600 millones de dólares, financiado por el Banco de Desarrollo del país asiático.
Sin embargo, 12 años después esta iniciativa no ha pasado del anuncio inicial y enfrenta las dificultades técnicas de atravesar parte de la selva y lidiar con zonas controladas por la guerrilla.