+ El control, en 5 figuras claves
QUERÉTARO, Qro., 4 de Marzo de 2011.- El control del Partido Revolucionario Institucional está a partir de hoy en cinco figuras claves para su gobernabilidad interna y para que por su influencia en las decisiones nacionales sea el rival a vencer en el 2012.
Analistas de diversos medios políticos señalan que al ascender Humberto Moreira a la dirigencia nacional del PRI, se reconfiguran los pesos y contrapesos del tricolor.
Así, se destaca la presencia de los gobernadores, mayor aún, y como figuras de poder en la cúpula están Manlio Fabio Beltrones, Enrique Peña Nieto, Beatriz Paredes y Emilio Gamboa.
Los gobernadores juegan un papel importante porque tienen el control territorial, pero se les critica que van más por negociaciones en la cúpula que a su relación con la base territorial.
Al definir a Moreira, se habla de un liderazgo resultado de la negociación de grupos, pero quien piense que Enrique Peña Nieto lo impuso, estaría muy equivocado, pues el ex gobernador de Coahuila tiene presencia y gran habilidad política.
Pero por encima de todo, se le mira como conducto para una buena relación con el poderoso Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación. Esa es su fuerza.
Manlio Fabio Beltrones Rivera es visto como un hombre fuerte por ser el líder del Senado de la República y de los senadores del PRI; pero es notable su arraigo en el Sector Popular.
En cuanto a Beatriz Paredes, se posa sobre el sector Campesino y en las mujeres priístas.
Por su parte, enrique Peña Nieto es “el hombre fuerte” del Estado de México, región donde se concentra una enorme cantidad de votos en el país y donde resalta el poderío económico; por eso quizá, su posicionamiento que le ha dado respaldo de la mayoría de los gobernadores priístas. Pero el apoyo empresarial también es muy fuerte y ha logrado a traerlo igualmente del Distrito Federal.
Refleja un importante manejo entre medios de comunicación pero yendo más atrás, el dueño de las cifras más altas de aceptación para que sea eventualmente candidato del PRI a la Presidencia de la República, tiene la fuerza y el respaldo de un grupo tradicionalmente poderoso por décadas, el Grupo Atlacomulco”, de donde surgieron figuras legendarias como el profesor Carlos Jank González por citar un ejemplo.
Emilio Gamboa en cambio es visto como un operador político dueño de grandes habilidades y posee vínculos con hombre de poder, como aquellos formados en el sexenio de Miguel de la Madrid, o el de Carlos Salinas, pero después ha sabido tejer una excelente relación con intereses empresariales y de sectores.
Retornando a Beltrones, el senador sonorense ha navegado en los últimos años sobre un cresta de la ola política de una manera que le da reconocimiento como operador político, al grado de ser considerado el factor de gobernabilidad para el país en los últimos 11 años.
La mayoría de los candidatos ganadores fueron senadores bajo su coordinación; tiene sólido respaldo del sector popular; una base de gobernadores le crean una plataforma muy importante de poder. Comenzando con el de Aguascalientes, varios le son afines.
Esto lleva a resumir también apoyo de su “compadre”, Emilio Gamboa, cabeza del sector popular priísta que controla 143 diputados federales de los 237 tricolores en San Lázaro. También 18 de los 34 senadores tricolor y yendo a los estados, 18 de los 19 gobernadores priístas son cenopistas. El único fuera de la esfera es el cenecista de chihuahua.
Cuando Moreira se perfiló a la dirigencia nacional, buscar la fortaleza del ahora líder nacional llevó fácilmente a Elba Esther Gordillo. No faltó por supuesto su trabajo personal que lo acercó a algunos gobernadores y a Enrique Peña Nieto.
Beatriz Paredes, al dejar la presidencia del PRI se fortalece. Ira de tiempo completo al trabajo legislativo y una eventual presidencia del Congreso de la Unión, donde ha sido confirmada la influencia del cenecismo.
Es hora de sumar esa fuerza, resume el análisis de los expertos que rodearon el evento priísta de Querétaro este día, porque como dijo Humberto Moreira en su discurso oficial, sólo unidos pueden ganar y sólo unidos, podrían no temer a la herramienta que sus enemigos han utilizado para competir en los últimos procesos electorales, herramienta que al PRI le han significado descalabros: las alianzas.