GUAYMAS, Son.- Dice un columnista del DF que se debe exigir al IFE lo que más lo distingue, autoridad moral en nuestra democracia, aún cuando no sea igual con sus integrantes y llamó odiosa comparación al mencionar a José Woldenberg, y al actual, Leonardo Valdés Zurita.
Es que el IFE fue cachado gastando 162 mil pesos en el mantenimiento de sitios donde crían o curan perros, según el portal de Compranet, el que divulga contratos y gastos de dependencias de gobierno. Dice que pagó 127 mil 586 pesos a una unidad canina ajena a su organigrama.
Saber más es cuestión de revisar ese portal, pero el tema vino a mi mente por el escándalo de la “tenencia de perros” que aprobarían no el alcalde y sus engrillados funcionarios, sino los regidores que, inmersos en la confusión de los `cómos´ para eso del 2012, cayeron redonditos en esa ociosa discusión y olvidaron la previa, la de dejar o no seguir en la pista de carreras al secretario del Ayuntamiento Alonso Arriola.
Entraba en crisis el Ayuntamiento cuando Arriola logró el apoyo de 8 ediles vía desayunos, viajes y no sé qué más, para fincar su posición insurgente, al saber que él no era el “bueno” para quienes mandan en el PAN y que su gran amigo el alcalde, no podría hacer nada para heredarle su silla.
Total, el tema de los perros será polémico y saturará medios, pero acabó la polvareda del presunto divorcio de los amigos que lo son desde estudiantes, luego como ingenieros constructores y se remachó con la aventura azul que sin querer, los hizo dueños del Municipio.
Pero este jueves me llegó un comunicado del presidente del PRD, José Guzmán López González, el profesor de Chihuahua que se quedó en Guaymas, donde le aprendió mucho al notable grillo Antonio Torreblanca. Levantará de nuevo esa polvareda, pues acusa a Alonso Arriola de financiar a perredistas que se le oponen en el Comité que preside, para tumbarlo.
Así, sin más, acusa que al no ser querido por el PAN, Arriola volteó al perredismo donde Guzmán (es nombre, no apellido) ya dijo que “si son azules, nones”, en cuanto a alianzas. Desayunó con tres cabezas de grupo con los que el dirigente quiso conciliar --y dividió el poder, un gran error, pues el poder no se comparte--, para iniciar esa meta y allí estuvo también José Ordaz, un ex priísta, siempre en conflicto en su sector, el obrero cetemista, que luego emigró con disfraz al PRD, y ya sin capucha a Convergencia y hoy coquetea de nuevo con los tricolores que abandonó.
A ver qué responde Arriola, quien “presidió y financió la reunión que sostuvo con Oliver Flores Bareño, Eva Languré Ramírez, Daniel Morales Pardini, Margarito Santiago López, Jesús León Salas y José Ordaz Aguiar”, presuntamente “para hablar sobre el tema de la destitución de José Guzmán López González, quienes de manera particular reconocieron y declararon a medios de información sobre esta iniciativa”.
Y Ordaz, quien ya bastante tiene con el antecedente de reñir con cuanta autoridad está al frente por su afán de quedarse con cuanto terreno ve al frente y hasta de ser parte de corruptelas donde millones de pesos cambian de manos en busca de la impunidad.
Quizá solo fue un desayuno y como dijeron, llegaron a saludar, pero igual no. Ordaz hasta regañó a un fotógrafo que lo captó en charla con el grupo porque “primero debes de pedir permiso”. Pero si prácticamente huyó del lugar, entonces no es tan inocente el objetivo de la reunión. Lo veremos el 15 de octubre, cuando se junten y lo aclaren… o lluevan piedras.
El caso es que Guaymas sigue engrillado a niveles que espantan, aunque me dice un empalmense que no es tan grave como lo que ocurre en Empalme, preocupante para la autoridad estatal que tanto ha querido hacer por esta zona, pero no ha podido ante la falta de talento de sus alcaldes, no obstante la nutrida obra pública en marcha.
Por cierto, me orientan que Empalme sigue en líos financieros y la calificación de 8 presumida por Javier Caraveo, es sólo un dictamen que no calificó el Congreso “por inconsistencias”. Lo que faltaba pues, al alcalde de la ex rielera ciudad, es mentiroso.
Finalmente, Francisco Bueno vuelve a los titulares y aunque se le raspa un poco por cosas que le son ajenas –debe ajustar tuercas en el camino--, la realidad es que ha madurado y es parte de una reserva para lo que se ofrezca en 2012 que ya pasea en su ´folder´ Francisco López Lucero. (Tomada de EXPRESO)