CD. DE MEXICO.- El presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, logró domar a la bestia perredista luego de la fallida elección en Oaxaca, Veracruz, D.F., Zacatecas y Chiapas, para elegir a los integrantes de los órganos del partido que decidirán alianzas electorales y la selección del candidato presidencial.
Y es que a unas horas de que se dieran con todo en esas cinco entidades donde se cancelaron los comicios “por falta de condiciones”; los dirigentes de las corrientes enfrentadas que apoyan por un lado la candidatura de Marcelo Ebrard y por otro, la de Andrés Manuel López Obrador; se reunieron en torno al Presidente del partido y acordaron dialogar.
El acuerdo, recalcó Zambrano ante las suspicacias de la prensa, no es para repartir el pastel, para repartir posiciones, sino para alcanzar acuerdos que garanticen una siguiente elección la próxima semana, explicó en conferencia a la que asistieron los dirigentes de las corrientes en conflicto, para tomarse la foto y no haya duda de la mentada “unidad partidista”.
La labor del presidente Zambrano, sentar a los rijosos a dirimir. En tanto que de las 30 entidades donde se celebraron los comicios internos, sólo en cinco se registraron problemas, que dañan la imagen del partido.
Los acuerdos en la “mesa de diálogo” serán, en términos prácticos, negociar posiciones en los consejos estatales/nacional y el Congreso nacional, instancias que decidirán cómo se seleccionará al candidato presidencial, y seleccionará a los candidatos al Senado y la Cámara de diputados.
Diputados se curan en salud
Muy mal parados quedaron otra vez los diputados federales al aprobar una ley de ingresos que daña la economía de las familias y consiente y mantiene privilegios a los grandes consorcios que no pagan impuestos a la medida de sus grandes ganancias.
Y aunque todavía no todo está dicho, pues este lunes inició el Senado de la República la revisión de la iniciativa; la realidad es que las bancadas del PRI y PAN acordaron no cancelar los 36 centavos por litro de gasolina magna que la federación otorgaría a las entidades federativas hasta 2010, y lo prorrogaron tres años más.
Los priistas dicen que de cualquier modo esos 36 centavos sin llegar a los estados, no se descontarían al precio final de la gasolina, así que mejor se aseguraron de orientarlos a los estados hasta diciembre de 2014.
La trampa en este atraco a los bolsillos de los mexicanos, que viven en un entorno de desempleo y baja del poder adquisitivo, es que aunque el Congreso se cure en salud y diga que el precio de las gasolinas es facultad del gobierno federal, los diputados no hicieron su trabajo en bien de la sociedad y no asumieron su facultad de eliminación esos 36 centavos, en vista de que el recurso incrementado para los estados, ya no tenía razón de ser el próximo año en que vencía el decreto presidencial que así lo impuso. Lejos de eliminarlo, lo prorrogaron tres años más.
El diputado que tuvo hasta el ánimo de mofarse de este atraco fue el coordinador de los priistas, Francisco Rojas, quien en este reparto de responsabilidades entre ejecutivo federal y la Cámara de Diputados, negó que el Congreso se cure en salud, porque ni estaba enfermo.
“No nos curamos en salud, porque ni estábamos enfermos”. Lo único que se hizo fue “una extensión de un decreto de hace dos años para que corriera hasta el 2014”, dijo riendo al término de la sesión el pasado jueves.
Sobre las críticas de la infamia que estaban cometiendo los diputados del PAN y PRI al aprobar los gasolinazos hasta el 2014, Rojas Gutiérrez lo tomó muy a la ligera al señalar que son solo posturas políticas: los diputados lo único que hicimos fue prorrogar el decreto, el aumento en el costo de la gasolina es independiente.
Así, la gasolina seguirá subiendo los próximos años, además del aumento mensual que realiza el gobierno federal, se mantendrán –porque los diputados no asumieron su facultad para eliminarlos--los 36 centavos al costo final del combustible.
La crítica es que para salvar el gasto en el país, los así llamados representantes sociales volvieron a cargarle la mano a la sociedad, dejaron libres de pago equitativo de impuestos a las 30 empresas más poderosos del país, al mantener los paraísos fiscales; el IVA al 16 por ciento, aunque el PRI se comprometió a bajarlo al 15; los 36 centavos al precio final de la gasolina y aprobar el incremento de la deuda nacional, no obstante que la economía crecerá menos.