GUAYMAS, Son.- Cuando levantaron la mano los regidores sentenciando a PASA a ocupar el banquillo de los acusados de presunta diablura hecha con el Cabildo de Antonio Astiazarán --firmar un contrato y cumplir otro--, me sentí incómodo.
Fue por varias razones. Una, ver regidores opinando sin saber --es la verdad-- de qué se hablaba en la mesa de decisiones que muchas veces han significado auténticas catástrofes para el puerto por `cortesía´ de las pasadas improvisaciones panistas o las ingenuas o perversas, del izquierdoso y por fortuna fugaz perredismo de finales de la pasada década.
No conocen el contrato. Lo afirmaron desde el panista Luis Zaragoza, hasta la priísta Carmen Aída García. Y nadie, créalo, les dijo que les entregaría copia. Ni el carísimo super asesor jurídico Sergio Alexandres, cuyo rostro no reflejaba preocupación por el suelo guaymense que dejarán si las cosas salen mal. Total, él se irá a La Paz o a donde surja otra chamba como ésta.
Hubo quejas sobre la falta de oficio en la Dirección Jurídica Municipal y el lento desempeño de los responsables legales que llenan la oficina de Sindicatura. Pero igual, el alegato se perdió en el aire y el acuerdo fue un proceso para anular ese contrato con la empresa Procesos Industriales, dueña de la firma King Kong, contratada para que la comuna dejara de recoger la basura con abultada nómina de 200 obreros y carísimos insumos.
Si gana, el Ayuntamiento habrá demostrado la diablura de PASA y le haría “devolver las entradas”. Si pierde, eso no lo dimensionan los funcionarios inexpertos o mal intencionados que rodeaban al alcalde César Lizárraga, enfrentarán una querella legal por daños y perjuicios por unos 80 millones de pesos.
Será el contragolpe de abogados expertos, juiciosos, perros viejos en la materia, no asesores como el carísimo importado Alexandres, a quien se atribuyen varias visitas a la oficina de la empresa acusada, exigiendo cosas más inmediatas que corregir o no el contrato.
Ojalá los regidores del PRI o del PRD ignoren el canto de las sirenas, pues es criminal aprobar o no cosas que en tres o cuatro años, cuando ya no estén allí, el Ayuntamiento herede estos duros impactos a su economía.
Y ojalá que tengamos los guaymenses capacidad para escoger lo que sigue en julio próximo, porque más improvisaciones así, la verdad, un pueblo difícilmente las aguanta.
Cuen, enlace
Se sintieron bien los empresarios de San Carlos, quienes tienen años advirtiendo que las cosas no andan bien, cuando el gobernador habló este miércoles con ellos y les dio respuestas esperadas rumbo a recuperar camino perdido en el último lustro.
Desde Rafael Caballero hasta Tavo Llano, tienen buen sabor de boca por la reacción del gobierno actual, que los ha entendido y para no andar saltando en suelo parejo, el propio Guillermo Padrés les nombró un enlace para lo que se ofrezca, el representante del Fideicomiso Impulsor, Mario Cuen.
Es el mejor para la tarea, pues ya ha estado al lado de esos grupos que se preocupan por su suelo y advierten de medidas para no jugar con el futuro.
Y si de nombramientos se trata, Carlos Zataráin recibió uno para dirigir en 8 estados del país, una organización de diputados y senadores priístas que trabajarán por Enrique Peña Nieto, cosas pues, del futuro cuyo epicentro es julio de 2012.
Por cierto, saludé a Manuel Aguilar Juárez, virtual candidato azul a la alcaldía, y no aguanté y le dije que en su equipo hay mucha improvisación, pero me aclara, su equipo es el que trabaja con él en sus negocios y si hay quienes se ostentan como operadores, es falso. Pues sí, brotan tunas y el nopal se llena de visitas.
En Empalme, Javier Caraveo dejará la alcaldía a mitad de marzo para buscar la diputación local que tiene Moisés Laguna, quien hará lo propio para ir por esa alcaldía. Allá, saludé a Javier Neblina, de Sedesson, y no me lo confirma, pero tampoco negó que si estaría en las listas por el Congreso local, pero me dijo que sería un buen lugar para seguir ayudando al trabajo de su jefe, el gobernador.
De salida, Sergio Llánez Rueda llegará pronto a ocupar su Notaría en Guaymas, al terminarse su tarea en el IFE estatal. Cuauhtémoc Benavidez, su suplente, suena para un nuevo espacio. (Tomado de EXPRESO)