Los priistas están muy indignados porque la PGR investiga a los tres ex gobernadores del PRI que administraron Tamaulipas en la última década: Manuel Cavazos Lerma, Tomás Yarrington Ruvalcaba y Eugenio Hernández Flores, por los presuntos delitos de lavado de dinero, enriquecimiento ilícito y otros de tipo fiscal.
Lo cual no cae de sorpresa a los mexicanos en su conjunto, sólo a la militancia del tricolor, cuyos líderes coinciden en explicar a la opinión pública que este tipo de acusaciones son parte de una guerra sucia electoral en contra de su partido; y no una realidad acerca del comportamiento de los funcionarios públicos emanados del PRI.
En esa lógica, Mario Marín y Ulises Ruiz, ex gobernadores de Puebla y Oaxaca, son blancas palomitas, que incluso en el caso del poblano, ya se le integró al equipo de campaña del candidato presidencial Enrique Peña Nieto; y que en su momento, como hasta ahora, fueron arropados por los jerarcas del tricolor y hasta premiados.
Seguramente ese mismo destino correrán los ex gobernadores tamaulipecos, y las acusaciones en su contra, así como la alerta migratoria que emitió el gobierno federal para impedir que los ex mandatarios salgan del territorio nacional, a final de cuentas quedará como una anécdota.
Sobre todo porque el gobierno federal, caracterizado por su ineficacia e ineficiencia en el tema de la procuración de justicia, es posible que en esta ocasión también fallará en la investigación y los resultados de la misma serán que Cavazos Lerma, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández son inocentes de los presuntos delitos que se les imputa y víctimas del gobierno federal.
Sobre este tema, mientras el presidente nacional del PRI, Pedro Joaquín Coldwell levantó la voz para exigir al gobierno de Felipe Calderón no utilizar los instrumentos de justicia para el golpeteo político.
Francisco Rojas, pide no manchar la honorabilidad de los priistas
A la vez, el coordinador de la bancada tricolor en San Lázaro, Francisco Rojas, pidió al ejecutivo no especular, “pues pone en juego la honorabilidad de mucha gente; lo que en épocas electorales enrarece el clima político”; comentario que muestra que la preocupación del mexiquense es que no se enrarezca el clima político en tiempos electorales más que la aplicación de la justicia.
Y aunque el coordinador Francisco Rojas dice que no hay indagatorias en contra de los ex mandatarios, cabe mencionar que sí existen y están radicadas en las subprocuradurías de delitos federales y la de investigación Especializada en Delincuencia Organizada; y las acusaciones no sólo derivan de la negativa de los ex gobernadores a declarar ante las autoridades sobre el caso del asesinato del ex candidato priista al gobierno de Tamaulipas en junio de 2010, Rodolfo Torre Cantú.
Jesús Zambrano pide pruebas a la PGR contra ex gobernadores
Y como no es sorpresa para nadie tampoco que el gobierno federal ha hecho uso de los instrumentos de la justicia para enrarecer el clima político y atacar a adversario políticos, pues si bien se presume que los acusados bien pueden estar involucrados en los actos que se les atribuyen, también es cierto que siempre resulta que no hubo pruebas para atribuirles los delitos y todo queda en un usted perdone.
Por lo que desde el PRD el presidente nacional del partido, Jesús Zambrano, se pronunció porque la PGR acredite las acusaciones y que esclarezca la “alerta roja” emitida contra los ex gobernadores priístas, a los que se les ha vinculado con el narcotráfico.
Además, dentro de este contexto en que los priistas se hacen los sorprendidos, el coordinador de la bancada de los diputados del PAN, Alberto Pérez Cuevas, lo mismo que Zambrano Grijalva, sacaron en conclusión que siendo Tamaulipas uno de los estados donde se registra un alto índice de delincuencia, ésta no se puede entender sin el amparo y la corrupción de integrantes del poder público local, con ramificaciones federales”.