+ El Resurgimiento de San José de Guaymas; infraestructura para el desarrollo conurbado; Susana estará en la boleta el 2018
GUAYMAS, Son.- Dice nuestra historia que los primeros exploradores llegaron a esta región por mar, en 1539, y fue Francisco de Ulloa, uno de los capitanes de la Armada de Hernán Cortez, el descubridor de la Bahía de Guaymas, a la cual por su perfección y barreras naturales rodeándola, llamó “El puerto de Puertos”.
Yo recuerdo entre la niebla del tiempo, letras blancas sobre vieja madera colgada en Aranjuez, magnífica construcción estúpidamente destruida en los años 80 luego de encontrarse presunta evidencia de narcotráfico –nunca confirmada--, en las que había una reza: “Hacienda Aranjuez, fundada en 1634”.
No sé si hablaba de los primeros colonizadores o una primera piedra de la hacienda citrícola donde hasta lienzo charro había.
El caso es que desde siempre hubo actividad en esa zona que más tarde se llamaría San José, sede de los primeros asentamientos hasta que en 1701, el misionero Juan María Salvatierra fundó San José de la Laguna. Allí llegaban cazadores y recolectores de las familias “Guaima”, súbditos de yaquis y seris, que en esta frontera geográfica dirimían diferencias nunca zanjadas, pues hasta la fecha, Guaymas es el “jamón del sándwich” en los pleitos donde miden fuerza Ciudad Obregón y Hermosillo.
Bueno pues, esos sitios siguieron con altibajos, y hace cuatro décadas comenzó un declive al “salarse” el agua de sus pozos, lo cual hizo declinar su producción de naranja y la chavalada le buscó por otro lado, pues la labor de sus antecesores que fueron dotados entre 1937 y 1947 de unas 15 mil 600 hectáreas, “ya no dejaba”.
Con el nuevo siglo cambiaron de opinión. La mancha urbana llegó y sus suelos se volvieron una mina de oro. Todavía hay unas 8 mil hectáreas listas para sumarse al desarrollo y, a juicio del presidente del Comisariado Ejidal, el abogado Jesús Alberto Garza Osuna, serán muy cuidadosos del uso a dar a esa superficie, pues quieren un mejor futuro en cuanto al ordenado crecimiento que requiere una ciudad.
El sábado me platicaba de ello este personaje que llegó a dirigir el ejido con mentalidad distinta, imponiendo un hasta aquí a la práctica irresponsable de malbaratar terrenos y dejar pasar, dejar hacer, en perjuicio de los auténticos ejidatarios. Y sí, me acepta que pudo haber habido corrupción en esas operaciones, pero si es el caso, habría demandas formales y procedimientos de recuperación correspondientes, como ya los hay. Ya están expedientes en revisión en los tribunales.
Ese día un evento confirmaba lo que aquí expongo: Llegó la diputada federal Susana Corella a formalizar obras. Ya van avanzadas, pero tanta chamba en CDMX había impedido a la legisladora cumplir con la visita prometida al ejido.
Dio el banderazo y confirmó los 4 millones y medio de pesos conseguidos para transformar la fisonomía del poblado. Corella Platt dijo que no fue difícil apoyar a ese poblado con ese proyecto, pues es gente que “nos pide ayuda, pero nos sugiere cómo y también aporta, para ellos y para los demás”.
Eso es cierto. Han arreglado caminos luego de las lluvias; han gestionado carretera, nuevos pavimentos y aportan, hacen donativos, ofrecen suelos para escuelas y hospitales y así.
Por eso Susana Corella expresó que en ese momento veía “el resurgimiento de San José de Guaymas”.
Las obras a terminar en diciembre son un kiosko, 325 metros cuadrados de pasto sintético, 354 de área deportiva y mil 200 de concreto. Y habrá más. Pero el proyecto al describirse, no contempló otra cosa, quizá más importante: el entusiasmo de la gente, que levanta su mirada y piensa en proyectos mayores. Llegan, enhorabuena, los nuevos tiempos de san José.
El resurgimiento, seguro que sí.
Garza Osuna dijo que el ejido más extenso de Guaymas –creo que es uno de los tres más grandes en México-- sigue produciendo cítricos y extracción pétrea como principales actividades, pero vuelve a ser objeto de inversión pública de carácter federal.
Y la diputada Corella confirmó que la primera etapa del Puente Metropolitano Guaymas-Empalme iniciará a finales de este año con 40 millones de pesos, para apoyar un circuito turístico hacia el área y un polo de desarrollo conurbado.
A provechó para confirmar también que en breve se iniciará la nueva etapa del Malecón Turístico de Guaymas, porque es hora de voltear a ver este renglón, que hemos descuidado mucho pese a que, ya se sabe, deja dinero. Y mucho.
Y no pudo sustraerse la prensa, ni ella, del tema grillo. Se abrió el debate y fue muy interesante cada respuesta de la diputada Corella. Pero ya le platicaré en posterior espacio que estará en la boleta de 2018 y eso enriquece, con mucho, el proceso de 2018, para el que sobran opciones.