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Estas líneas...

+ En Empalme, la gente se impone ante presunto abuso policíaco; se manifiestan con acto de soberanía popular; fiesta en la renovada plaza de los 3 Presidentes, el 15; imagen en el Senado: tiempos traen tiempos

 

EMPALME, Son. – La otrora “Ciudad jardín” nacida oficialmente en 1905 al inaugurarse la prolongación de la vía férrea al sur, se manifestó imponiendo un acto de soberanía popular plena.

Define el diccionario que la soberanía popular es una doctrina política y pregona que la autoridad última del gobierno reside en el pueblo, partiendo de la tan manejada idea de que los gobernantes trabajan para el pueblo y son responsables ante él.

Por eso el pueblo escoge, luego legitima esa selección, pero si el gobierno escogido no funciona o no defiende correctamente los intereses populares, tiene el pueblo la potestad de disolverlo y sustituirlo, lo cual no es fácil, pero la idea de nuestra pregonada democracia es esa.

Esta historia inicia con la detención de Jesús Antonio “Toñín” Cervantes Corral, cuando se dirigía a entregar un automóvil propiedad del regidor Javier Ibarra González que, según policías autores del documento informativo de su actuación, tiene reporte de robo en Arizona.

Fue llevado 3 veces ante el ministerio público en las más de 36 horas privado de su libertad por agentes de la Policía Estatal de Seguridad Pública, desde el Centro de Detención Municipal de la comandancia policíaca empalmense.

Lo que debió ser desde el principio, ocurrió luego de ese lapso que conducía a una revuelta social: el conocido “Toñín” fue dejado en libertad sin cargos en su contra. Y ni siquiera recibió el falso “usté perdone” que estilaban en el pasado policías y “emespés” para limpiar la afrenta.

Como líder de masas, agradeció a la comunidad su apoyo y solidaridad. Se dijo ciudadano de bien y explicó que su error fue lavar un carro –su negocio es ese-- propiedad del edil Ibarra y llevarlo a su domicilio, sin saber que sería detenido por el presumible delito de robo de vehículo en el extranjero y lo que resulte, por los cumplidos agentes de la PESP.

“Toño” habla de la pesadilla vivida: “fueron horas que pasé en las celdas, no entendía nada cuando me detuvieron. Dejé a la esposa de Javier (Ibarra) con los policías, fui a comer, después me dicen que tengo que ir a declarar; como no debía nada, fui a la Agencia del Ministerio Público (de) donde ya no salí”.

Se muestra ingenuo al quejarse del centro de detención sin un área de atención, dónde descansar, del “calorón” que hace y, en síntesis, de todo cuando debe soportar cualquier persona al enfrentar presumible responsabilidad por algún delito o infracción cometida.

No tuvo comunicación con el dueño del auto, pero aquel se reportó de la Ciudad de México con sus familiares y supo lo acontecido. En sus redes informó que regresará este sábado y negó que el auto fuera robado. Y no es cualquier auto.

Entre tanto, Cervantes Corral tuvo el respaldo de su esposa, de sus hermanos, amigos y pronto de la población en general. Y allí se manifestó el pueblo.

Pidieron su libertad por obvias causas. Conducía un vehículo hacia el domicilio del dueño, porque es parte del servicio. Nunca pide identificación a la persona ni documentos comprobatorios de propiedad del vehículo a nadie. Además, es un vehículo llamativo, deportivo, color rojo y de marca cara, visto pasear durante meses por todo Empalme, un pueblo chico donde todos se conocen y no hace falta acuciosa investigación para saber quién es quién y qué hace.

La autoridad judicial, cerrada como es para informar, no respondió a la petición, convertida en queja enseguida y luego en amenaza: cerrarían calles, la carretera federal incluso. Al no ver resultados por parte de la autoridad, la soberanía popular se impuso, lo cual siempre es muy bueno cuando no involucra intereses sucios.

Un policía no decide por sí mismo, espera órdenes. El comandante se suma a la línea con sus jefes en Hermosillo cuando hay presión en algún tema. En este, la presión social era fuerte. Desde la capital, se ordenó liberarlo, o el feudo de Luis Fuentes ardería no precisamente por el verano.

Javier Ibarra, quien ha sido funcionario municipal y apunta para la Secretaría del Ayuntamiento a partir del 16 de septiembre, estará en un brete si no aclara la posesión del vehículo, pues dos agentes de la PESP afirmaron haber encontrado reporte de robo en el extranjero.

Una de las dos partes miente. La respuesta deberá darla el Gobierno del Estado, jefe de los oficiales, sin menoscabo de la que dé quien hoy está en el cuestionamiento de por qué trae un auto “tan caro” si no gana tanto.

Y de pilón, robado, según la gente que trabaja para la PESP de Víctor Hugo Enríquez, secretario de Seguridad Pública; Arturo López Bazán, coordinador Estatal Operativo, y Roberto Leyva, comisario de la Coordinación Estatal de la Policía Estatal de Seguridad Pública, suponiendo que sea actual la información del portal https://seguridad.sonora.gob.mx/directorio por lo general desfasados entre las dependencias oficiales, a las que no se les da bien eso de la transparencia.

El lunes sabremos la verdad oficial… o no. La extraoficial, la comenta el pueblo en todos lados.

FIESTA POPULAR EN LA PLAZA

Para dar realce a la fecha escogida por los mexicanos para marchar hace ya 214 años hacia el fin del yugo imperialista español, habrá fiesta este 15 de septiembre en la renovada plaza de los Tres Presidentes.

Este jueves lo confirmó la alcaldesa Karla Córdova durante el evento con el cual rindió tributo a las mujeres de los pueblos originarios. El Ayuntamiento de Guaymas se sumó a la celebración del “Día Internacional de la Mujer Indígena”.

Qué bueno que hay estas cosas. El evento coordinado por el Instituto de la Mujer resaltó la importancia de visibilizar a esta gente, sus luchas por mantener costumbres, tradiciones e historia.

Hoy el civismo patriótico que se extinguía durante el neoliberalismo entreguista se recupera con estos eventos, que ya son parte de estas fechas en los espacios de convivencia a los que ya damos mejor uso que aquellas borracheras afines al bolsillo de particulares que, demostradamente, no aman a su pueblo.

Iré. Quiero escuchar al tenor mexicano Fernando de la Mora, al quinteto del maestro Gonzalo Romeu, a la nueva generación de “Los Panchos” y al Mariachi Juvenil Tecalitlán. Buena cartelera.

SENADORES, TIEMPOS TRAEN TIEMPOS

A propósito de nueva generación, gustó la fotografía captada en la primera votación al instalarse el Senado de la República. Se la expongo: vota el senador de Morena Heriberto Aguilar Castillo y, al fondo, presidiendo la Mesa de Decanos, el senador priísta Manlio Fabio Beltrones.

Dos generaciones. Tiempos traen tiempos. A ver si el guaymense logra acercarse a los niveles políticos que logró el originario de la Colonia Irrigación, hoy Municipio de Benito Juárez.