+ Se retrasó obra de la Serdán, pero supervisión de lujo la reactiva; el gobernador, el titular de Semar y la alcaldesa ratifican que se terminará en diciembre; amplían revisión a los 13 frentes de obra en el puerto; avanzan proyectos en el astillero de Marina; Sidur mantendrá supervisión; Rogelio Bello va más allá de su atrabajo en Asipona
GUAYMAS, Son.- Es verdad, la obra de rehabilitación de la avenida Serdán tarda, mucho, pero la noche de miércoles platicaba con un ingeniero que conoce del tema y me aceptaba que no debía ser así.
El punto se explicó cuando le expuse la queja de Arturo Sandoval; o la que, con conocimiento de causa –y perjuicio para sus negocios, de por sí afectados por la economía actual—, platicó Esteban Terrazas: trabajan un día o dos y, sin explicaciones, desaparecen 5 o 7. A veces semanas.
La obra asignada a un consorcio asentado en Guadalajara comenzó en dos frentes, de dos cuadras cada uno. Esas 4 cuadras es un drama, algo que nos pone ansiosos pues se nos dificulta transitar por el Centro Histórico de la ciudad y nos alejamos. El comerciante paga las consecuencias.
Sandoval, el representante de los comerciantes establecidos en este sitio aceptó a nombre de su gente, que aguantarían mientras se trabajaba en ese magnífico proyecto, pues rescatarán la ciudad, literalmente. Pero el tiempo pasa y no fue lo esperado.
Por su parte, el re conocido líder de comerciantes Esteban Terrazas, lamentaba “obras lentas; a veces trabajan, a veces no, y eso afecta demasiado. Yo creo que estos días vamos a tomar otras medidas porque, sí, la verdad, están afectando demasiado, la gente no circula como debe circular, no hay… eso agrava más las ventas”.
Meses y meses y 4 cuadras sin terminar. Imagínese entonces las que faltan, desde calle 24 a la 9, y de allí el equivalente a 4 más. Unas 20, redondeando. Es difícil pensar cumplimiento a la oferta de terminar en diciembre, hecha al presidente López Obrador.
Quizá ocurra lo mismo en el bulevar Porfirio Hernández, el que mantenía destruido la concesionaria del movimiento marítimo comercial de altura que se llamó Administración Portuaria Integral y este año cambió a Administradora del Sistema Portuario Nacional. Pero eso es otra historia.
Centrémonos en el Centro Histórico y dos de las 4 cuadras en atortugada obra, llenas de aguas negras aunque se miren verdes, y un aroma ambiental definitivamente desagradable.
SUPERVISIÓN DE LUJO
Quizá esas múltiples quejas por el retraso y aparente abandono –como parecía entre calles 14 y 16--, se dio el manotazo en el escritorio y este jueves se vio trabajo supervisado, ni más ni menos, que por el gobernador Alfonso Durazo, el Secretario de Marina, Rafael Ojeda Durán; y la alcaldesa Karla Córdova.
Parece que hubo tiros de advertencia a la constructora y sus ejecutivos decidieron cambiar de supervisor, porque algo estaba fallando. Si no es que la empresa misma.
En el lugar de trabajo el gobernador explicó esa presencia: “Venimos a hacer una supervisión sobre los avances de obra en todos los frentes que traemos para la renovación y modernización del Puerto de Guaymas”. Esa era una de ellas, en la Serdán, una avenida emblemática aquí.
“Ustedes pueden ver al fondo la dimensión de toda la maquinaria, todo el trabajo, la intensidad del trabajo que se está haciendo”, ilustró Durazo en el video captado y, sí, en contraste con los días previos, ya se había transformado todo.
Supongo que parte de la regañada fue por eso que reiteró el gobernador: “Tenemos el compromiso con el presidente de entregar esta obra a más tardar a fines de diciembre de este año”. Y hablaba de toda la Serdán, no solo las 4 cuadras de precario avance.
Creo que lo harán. Es que a ojo del amo engorda el caballo y la dupla de lujo que son el gobernador y el secretario, tienen conciencia de lo que la gente siente, de lo que la alcaldesa vive día a día cuando se trata de explicar lo que pasa, sin que a veces eso sea posible.
Pero también entendieron a la perfección la petición de la doctora Córdova, no solo de apoyar y lograr gestiones, sino que se cumplan en tiempo y forma, no cuando los constructores quieran o puedan.
Así, en efecto, “esta obra va a cambiar el rostro de Guaymas”, resaltó Durazo al reiterar que es parte de la modernización del puerto que el presidente ha encomendado a la Secretaría de Marina, la instancia a cargo “de nuestro muy estimado almirante Ojeda”.
Y TAMBIEN LA EXPANSIÓN PORTUARIA
Los tres, se desplazaron hacia el puerto marítimo comercial de altura, donde hay muchas obras de rehabilitación y expansión en esfuerzo coordinado estatal y federal, para cambiar el rostro de Guaymas y dinamizar la economía local, estatal y nacional.
Se encerraron en la sala de juntas de Asipona donde hablaron de los 13 frentes de obra en marcha, con casi 4 mil millones de pesos de inversión y brotó por primera vez información del Astillero de Marina Número 6, extensión centro, donde antiguamente la industria naval albergó proyectos de buques trasatlánticos y empleó para ello a más de 2 mil trabajadores.
Pero no se extendió mucho el escueto dato de la visita. El almirante secretario no soltó prenda de lo que ocurre dentro de la instalación naval, donde ya cobró forma el casco de una gran nave. Esperaremos que confirme pronto lo que se produce ya en el rescatado astillero.
MANTENDRÁN SUPERVISIÓN
Heriberto Aguilar Castillo, el titular de Sidur, ya había reconocido atraso en la obra de la avenida Serdán, así que fue parte de la comitiva. Confirmó la incorporación de más equipo y trabajadores para acelerar la tarea que, enfatizó, se terminará en los tiempos previstos.
Remarcó también presencia, el administrador de Asipona, Rogelio Bello, cuyo desempeño como tal ha ido más allá de la simple recomendación naval, para fortalecerse como servidor público y participante activo en muchas de las tareas sociales con las cuales se rescata a la ciudad. Enhorabuena.