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La mató castigo por comer chocolates a escondidas

MOBILE, Alabama, 27 de Febrero de 2012.- Una niña de Alabama sufrió esta semana la peor de las torturas antes de morir a manos de sus propios familiares.

La pequeña Savannah Hardin, de solo 9 años de edad, sufrió una apoplejía cuando su su madrastra Jessica Mae Hardin y su abuela Joyce Hardin Garrard, la obligaran a correr durante tres horas sin parar.

De acuerdo a reportes de Daily News, la pequeña y dulce Savannah Hardin recibió tal castigo de parte de sus familiares, por comer unos cuantos chocolates a escondidas.

Tras ser obligada a correr por tres horas, Savannah murió por cansancio y deshidratación. La madrastra y abuela de la niña se encuentran en la cárcel esperando cargos de asesinato.

El terrible caso de Savannah fue considerada la muestra que ratifica la maldad con la que actúan padres de familia en todo el mundo. Hace unas semanas se reportó la noticia de un pequeño quien fue obligado a hacer ejercicios a muy bajas temperaturas cuando solo vestía su ropa interior.

“La verdad es terrible... la mayoría de los casos en los que un menor de edad es abusado o hasta asesinado tienen a los propios padres de familia como responsables de estos crímenes”, dijo un vocero policíaco.

Lamentó que nadie puede verificar que todos los padres sean aptos para cuidar de los niños que traen al mundo y “lo único que podemos esperar es que todos los menores de edad siempre estén cuidados para que esta clase de crímenes paren de una vez”.

“Los padres de familia deberían ser sinónimo de protección y amor... no todo lo contrario”, resaltaba una publicación de una organización social protectora de menores de Alabama, al manifestar su pena por estos resultados de la mala paternidad.