+ Se han aplicado las medidas apropiadas, dice el secretario de Gobierno; Miramar y San Carlos no se afectan, dice experto
GUAYMAS, Son., 12 de julio de 2019.- Los efectos del ácido sulfúrico derramado en la bahía de Guaymas están en análisis y se llegará al fondo del asunto, dijo el secretario de Gobierno, Miguel Pompa Corella.
Fue directo al señalar que desde el primer momento la Unidad Estatal de Protección Civil acudió al lugar y “hasta donde me informaron, se aplicaron los protocolos de cada parte para reducir riesgos y amortiguar los efectos del problema.
Enseguida dijo que esperan el resultado de los análisis químicos y biológicos que hacen la Secretaría de Marina y la Semarnat, “instancias que por supuesto, deben responder a toda interrogante al respecto”.
Consideró que no hay riesgos mayores pero sí efectos del derrame y luego de la evaluación de lo ocurrido y confirmado que ya no existen nuevos riesgos, se procederá con los correctivos que marca la ley para que eso no vuelva a ocurrir.
EFECTOS NO DEBEN ALARMAR
El doctor Guillermo Soberón Chávez, experto ambientalista y conocedor del entorno marino en la bahía de Guaymas, llamó a no alarmarse por el derrame de ácido sulfúrico en aguas de la bahía frente a la terminal que opera el Grupo México.
Es preocupante lo ocurrido, pero hablar de problemas mayores debe hacerse con responsabilidad, señaló, y fue reiterativo al subrayar que deben existir supervisiones más estrictas para que no se repitan los hechos.
Enseguida, para quienes se han preocupado por el derrame del ácido sulfúrico en la bahía de Guaymas, expuso lo siguiente:
“La explicación, a continuación, no quiere decir que no haya efecto por el derrame de ácido sulfúrico (H2S04), lo hay y muy fuerte, por lo que se deben aplicar sanciones fuertes a Grupo México, y asegurarse de que los equipos estén en condiciones para que no vuelva a ocurrir.
Pero el daño será muy localizado a la zona inmediata al derrame.
Para ponerlo en contexto, la Bahía de Guaymas, sin incluir el estero del Rancho (al norte de puente Douglas), tiene una superficie aproximada de 25.7 km2, o sea 25 millones 700,000 m2. La profundidad varía; los canales de navegación tienen cerca de 14 metros, pero hay zonas extensas muy someras, así que la profundidad promedio está en aproximadamente 3 metros, por lo que el volumen (superficie por profundidad) de la bahía es de 77 millones 100,000 m3.
El derrame es de 3,000 litros (3m3) o sea que, si el derrame fuera 100% H2S04, que no lo es, la concentración de ácido sería 0.038 partes por millón (por cada millón de litros de agua de la bahía habría 38 mililitros de ácido) si se revolviera homogéneamente.
Además, se debe de considerar que el principal mecanismo de intercambio de agua entre la bahía y mar abierto es por las mareas, por lo que, lo que saldría a mar abierto, sería mínimo, diluyéndose aún mucho más.
Por ello en las playas turísticas de Miramar y San Carlos no tendrán el más mínimo efecto”.