+ Se cumple el pronóstico en Coahuila y Estado de México; Morena arrebata la cuna del tricolor pero no pudo ganar a los Moreira en Coahuila; queda un PRI debilitado y el PAN deberá rectificar rumbos para el 2024; murió Ricardo Rocha; notarios públicos castigados
GUAYMAS, Son.- Anocheció el domingo con gran flujo de datos sobre la elección de gobernador en Coahuila y Estado de México.
No faltó el intercambio de acusaciones por compra de votos, “levantones”, amenazas y todo cuanto rodea a una elección. Igual de culpables serían ambos lados pues, ganar como sea, es característica de estos procesos.
Caía la tarde y la cereza del pastel, el Estado de México, olía a triunfo morenista. Oficialmente no se puede saber hasta termina oficialmente el conteo por parte de la autoridad, pero los números marcan tendencias y, como ocurrió en Coahuila, obligan a aceptar desventajas, como hizo Armando Guadiana, el candidato del presidente López Obrador, en Coahuila.
Ganaba Manolo Jiménez con coalición PAN-PRI-PRD en esa entidad gobernada por el PRI. Cuando “el rey del carbón” Guadiana aceptó ir segundo, denunció una “elección de Estado”, nada raro. Lo raro sería confirmarlo y perseguir a quienes cometen ilícitos.
Coahuila se mantendrá, aunque compartida, en manos del PRI y al menos esta vez, la alternancia seguirá en espera de lo hecho en el resto del país, donde el tricolor como otros partidos fueron pulverizados por la indignación de los mexicanos agraviados por la corrupción. La disputa del pasado entre el PRI y el PAN, desapareció para dar paso a esa alianza que camina hacia el triunfo.
Por cierto, Jiménez es conocido como “el peñanietito”. No quiero saber por qué y tampoco querrían los coahuilenses despedirlo en 6 años con la fama ganada por el expresidente.
Es lo que para el morenismo significa “fifí” de veras: tiene 39 años, es ingeniero industrial y de sistemas, así como maestro en administración pública por el Tecnológico de Monterrey; suma diplomados en ciencia política, negocios y liderazgo en instituciones de China, Estados Unidos y España. También fue regidor, diputado local y alcalde de Saltillo en 2017.
En el Estado de México es distinto, con Delfina Gómez enviada a ganar por Morena, para lo cual debió formarse esa alianza que a nadie gusta, con el PT y el Verde Ecologista, partidos que no ganarían si van solos, por eso se alquilan para la pepena con el ganador en turno.
La señora Gómez comenzó arriba en el conteo y la tendencia sugería triunfo con ventaja de dos dígitos, manifestación del rechazo acumulado en los mexiquenses por esos partidos que los mantienen en el atraso, en contraste con el gran crecimiento industrial alcanzado.
La sede del grupo Atlacomulco del legendario “profe” Carlos Hank, figura notable de la política del siglo pasado, quedó en manos de personajes cuyas maneras solo acrecentaron la pobreza y la desigualdad. Este sería el resultado.
De 61 años, Delfina Gómez Álvarez es maestra originaria de Texcoco, donde fue alcaldesa, diputada federal y es senadora con licencia; secretaria de Educación al comenzar el sexenio de su jefe, el presidente López Obrador, de confirmarse el triunfo sobre Alejandra del Moral (PRI-PAN-PRD-NA), por vez primera gobernará un partido ajeno al PRI. También por primera vez lo gobernaría una mujer.
Un partido debe proclamar de inmediato el triunfo y Morena lo hizo apenas se cerraron las casillas, a través de su presidente nacional, Mario Delgado, quien lo llamó “el triunfo de la honestidad” sobre todo lo malo que les trajo el PRI y sus propietarios a los mexiquenses, lo cual precisó así: “por fin, una batalla que duró casi un siglo, el pueblo del estado de México decidió acabar con el grupo Atlacomulco”.
Igual lo hizo el Partido del Trabajo con un comunicado firmado por su dueño, Alberto Anaya, quien rápido respondió para justificar lo que reclama por rentarse en cada proceso.
Coahuila todavía generará noticias y finalmente las cosas quedarían como se han previsto, con Riquelme y los Moreira –Humberto y Rubén Moreira fueron gobernadores y el menor, Alvaro, se reeligió como diputado local por la alianza-- tras las paredes de esa fortaleza “prianista”.
Pero el Estado de México será tema inagotable por el gran impacto sobre la moral de la oposición en el país, pues al perderse esta que fuera inagotable fuente de recursos y fortaleza tricolor, Morena abre la brecha para ganar la elección de 2024 y ampliar hegemonía en el país.
No sé que digan las encuestas mañana, pero hoy, el golpe devastador agrega poder y presencia al morenismo y no habría obstáculo para que la herencia lopezobradorista se extienda hasta 2030.
Vale considerar la reflexión de expertos, en el sentido de que la derrota de Alejandra Del Moral pone fin a la historia del PRI como partido nacional y obliga al PAN a razonar la efectividad de esa alianza. Debe el blanquiazul buscar su supervivencia jugándosela con la ciudadanía, no con otro partido, y enviando a la batalla a representantes auténticos del interés general, no la pandilla ambiciosa que lo desprestigió e hizo perder, por olvidar la doctrina de sus fundadores en aras de su bolsillo.
MURIÓ RICARDO ROCHA
A los 76 años dejó de existir este domingo Ricardo Rocha.
Más de medio siglo como reportero, presentador y luego ejecutivo de Televisa le permitieron cultivar grandes relaciones y fama. Al morir, dirigía su propia plataforma “Detrás de la noticia”.
NOTARIOS PIERDEN PATENTE
Dos notarios perdieron su patente por validar información falsa y hasta falsificar firmas, aunque en este caso fue en Puebla, donde la Dirección de Notarias selló las oficinas para evitar sigan operando.
La firma en un testamento habría sido falsificada para intentar el despojo de consorcio valorado en 600 millones de dólares. Valía la pena arriesgarse pues, pero parece que ya son otros tiempos.