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Protesta el Consejo Directivo de la CMIC

México, D.F., 3 de mayo del 2012.- El Presidente Calderón tomó protesta del nuevo Consejo Directivo de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) para el periodo 2012-2013 y recibió un reconocimiento por parte del sector.

En su mensaje, el Primer Mandatario felicitó a los trabajadores de la construcción en su día. Apuntó que con su trabajo construyen un México mejor y más fuerte. Señaló que la infraestructura es un factor básico para mejorar la competitividad, generar y atraer inversiones productivas que generen empleos, además de acercar a las comunidades, llevarles servicios públicos y detonar su potencial económico. Indicó que, actualmente, México cuenta con una inversión público-privada en infraestructura cercana al 5 por ciento del PIB, por encima del promedio de los países de la OCDE. Añadió que los proyectos en los que los profesionales de la construcción se han destacado a nivel mundial, por su magnitud y eficiencia, han sido carreteros, portuarios, hídricos y eléctricos. Como ejemplos mencionó el Puente Baluarte, el eje carretero Mazatlán-Durango, la presa de La Yesca o el Túnel Emisor Oriente.

A nivel nacional, indicó que los trabajadores de la construcción contribuyen a materializar el anhelo de millones de familias de tener una vivienda, patrimonio que les da tranquilidad y certidumbre para el futuro. Agregó que, con la nueva Ley de Asociaciones Público-Privadas, aprobada por el Congreso, México gana porque fortalecerá los recursos destinados al desarrollo de infraestructura, creará incentivos para traer tecnología de punta y mejorar el desempeño de los proyectos. Además, ganan las empresas, pues cuentan con certeza jurídica y mayores incentivos para la inversión, y ganan las familias al mejorar su calidad de vida.

El Jefe del Ejecutivo informó que, de enero a abril de este año, se han generado más de 343 mil empleos nuevos. Por último, subrayó que gracias al empuje del sector de la construcción y a la Ley de Asociaciones Público-Privadas, el sector de la construcción tendrá mayor dinamismo y elevará su competitividad, lo que transforma gradual pero perceptiblemente a México y mejora la calidad de vida de todos los mexicanos.