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Gasolina a 5 pesos litro, en Tamaulipas

+ Es producto del robo contra Pemex

CD. VICTORIA, Tamps., 26 de Julio de 2014.- En Tamaulipas el litro de gasolina cuesta tres veces menos que uno de leche.

Es un regalo: Magna y Premium a 5 pesos el litro, menos de la mitad de su valor oficial (12.77 la Magna y 13.45 la Premium). No sabe de impuestos ni de gasolinazos y sale menos cara que un jugo de naranja en el puesto de la esquina. Hay quienes le llaman "gasolina popular" y se vende como si fuera agua en el desierto.

Pero es robada, a Pemex, cosa que a pocos importa, porque la oferta de ahorrar es tentadora para y cientos de compradores acuden a diario a abastecerse en gasolineras clandestinas en las principales ciudades del estado.

Numerosos videos en redes sociales muestran su éxito comercial. Los clientes acuden por cientos y se llevan la gasolina en fila india a cuestas, en pequeños recipientes de plástico y en los tanques de sus coches, motonetas y camionetas. La cargan sobre sus cabezas, en botellas de agua, cubetas o en cualquier recipiente que pueda contener una gota de líquido. Decenas de autos particulares llegan a tomar parte en una hemorragia que litro por litro está costando miles de millones de pesos a Pemex y al erario público, mientras enriquece a dos de los principales cárteles de la droga.

Secuencias como esas son ahora cotidianas en ciudades de la frontera chica de Tamaulipas, donde se ha creado el más grande mercado negro de gasolina. Hasta 15% de la venta de combustible en el estado ha caído ya en manos de Los Zetas y el cártel del Golfo, organizaciones que anualmente captan 3 mil 500 millones de pesos por la venta de gasolina robada, gracias a una estructura paralela de distribución de decenas de miles de barriles de Magna y Premium.

Es un comercio ilegal, cuya complejidad y crecimiento no tienen comparación en el país. Una fotografía muestra la manguera de una toma clandestina descubierta hace unas semanas en el gasolinoducto Brownsville-Reynosa. Está rotulada con las siglas "CdeG", un acrónimo que no solo denota propiedad, sino que sirve de advertencia a quienes pretendan desmantelarla.

Hoy, organizaciones criminales no solo ordeñan prácticamente a placer los gasolinoductos en la entidad. Revenden el producto tan efectiva y eficientemente que se han constituido en verdadera competencia de Pemex, rompiendo su monopolio sobre la venta de combustible.

Documentos de la paraestatal, investigaciones federales, denuncias públicas en redes sociales y entrevistas con empresarios del ramo da detalles de cómo la gasolina se ha convertido en el gran negocio del crimen en Tamaulipas, una fuente de dinero fácil que junto con el tráfico de drogas, armas y migrantes alimenta el motor de la violencia en la región.

Cifras oficiales de la paraestatal apuntan a que en la última media década el gobierno federal ha perdido una sexta parte del mercado tamaulipeco de la gasolina, un fenómeno de magnitud inédita en el país. Como no pasa en ningún otro estado, la paraestatal vende menos combustible en Tamaulipas, algo inexplicable si se toma en cuenta que la economía estatal ha crecido de 3 a 5 por ciento anualmente, el número de autos se duplicó entre 2006 y 2012, y la población creció con una de las tasas más elevadas de México. Es un faltante que tampoco se explica cuando se toma en cuenta que no hay competidores para Pemex en el rubro gasolinero.

Es un declive que inicia en 2008 y que se mide por la cantidad de barriles de gasolina que Pemex vende a diario, una estadística que la paraestatal mantiene con sumo detalle. Ese año sus gasolineras vendieron 153 mil barriles diarios de gasolina en la región noreste del país. Hasta ahí, cifras normales. Pero en 2009, por primera vez en la historia, las ventas cotidianas descendieron a 151 mil barriles. La tendencia a la baja continuó en 2010, pues se vendieron 148 mil barriles.

En 2011 la venta diaria descendió aún más, a 142 mil barriles. Para 2012, último año para el que se tienen cifras completas, Pemex vendía a diario 141 mil barriles en su red de gasolineras. Eso es 12 mil barriles menos que cuatro años antes. Multiplicado por 365, quiere decir que en 2012 se vendieron 4 millones 380 mil barriles menos que en 2008.

Significa que la paraestatal dejó de vender 696 millones 420 mil litros. A precios de 2014 y tomando el costo de la gasolina Magna como base (12.77 pesos), la empresa está perdiendo anualmente 8 mil 893 millones de pesos únicamente en Tamaulipas. Si el precio al que lo vende el crimen organizado es estable (5 pesos), lo anterior querría decir que los cárteles de la droga se embolsan casi 3 mil 500 millones de pesos en ventas de gasolina robada al año. Solo el año pasado se detectaron en esa entidad hasta 539 tomas clandestinas