NUEVA YORK, N.Y., 15 de diciembre de 2024. - Dámaso López Serrano, “El Mini Lic”, exintegrante del Cártel de Sinaloa, dijo a la revista Proceso que Joaquín “El Chapo” Guzmán e Ismael “El Mayo” Zambada ordenaron respaldar la candidatura presidencial de Enrique Peña Nieto en 2012.
La instrucción fue que integrantes del Cártel, sus familias y comunidades bajo su control debían votar por el priista, sostuvo el capo detenido la semana pasada.
“Entre pueblo y pueblo agarras varios miles de votos”, declaró, al sugerir que el crimen organizado influyó directamente en los resultados de esas elecciones, concretamente a este que es uno de los grupos criminales más poderosos de México.
No hay pruebas concretas de acuerdos entre el PRI y el Cártel de Sinaloa, pero estas declaraciones influencian la opinión sobre el alcance del crimen organizado en la política mexicana y como se benefició durante esa administración.
DE CALDERÓN A PEÑA
Durante el mandato de Peña Nieto (2012-2018), Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública en el gobierno de Felipe Calderón, fue vinculado con el narcotráfico y, dice López Serrano, el Cártel de Sinaloa le pagó 10 millones de dólares por protección.
García Luna no trabajó directamente en el gobierno de Peña Nieto, pero acusaciones contra figuras clave de administraciones anteriores sugieren posible continuidad en estas relaciones.
No se sabe de investigaciones oficiales en México o en Estados Unidos, que vinculen a Peña Nieto con las declaraciones de López Serrano, pero estas se suman a críticas y señalamientos que el expresidente ha enfrentado en años recientes, incluyendo presuntos actos de corrupción durante su mandato.
Autoridades estadounidenses creen que las afirmaciones de “El Mini Lic” marcan la influencia del narcotráfico en las decisiones políticas de alto nivel.
La reciente captura de López Serrano traerá más revelaciones que afectarán la percepción pública sobre el papel de Peña Nieto en este controvertido episodio de la historia política de México, dicen los expertos, al comenzar a analizar la información que emerge de esa detención.
QUIEREN EXTRADITARLO
Dámaso López Serrano, “El Mini Lic”, fue recapturado por el FBI en el estado de Virginia.
Ya se había entregado a la DEA en 2017 por temor a ser asesinado por los hijos de su padrino, Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, pero fue liberado en 2023.
El “Mini Lic” y su padre, Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, buscaron hacerse del control del Cártel de Sinaloa, pero no tuvieron éxito y se volvieron informantes del gobierno de la DEA.
Se le señala como autor intelectual del asesinato del periodista sinaloense Javier Valdez Cárdenas, fundador del semanario Río Doce y corresponsal del diario La Jornada, por lo cual un juez federal ordenó su detención en 2020.
La Fiscalía General de la República inició gestiones para extraditarlo a México, aunque en este momento está bajo proceso penal por tráfico de fentanilo en los Estados Unidos.