Serían los años 50 la época dorada de los descubrimientos arqueológicos en México, pero muchos no entienden eso, sí en cambio que les daban hasta mil pesos por "un monito" o una vasija, clientes que iban hasta su casa en Jalisco u otros estados.
Hoy se pagan 50 mil o 100 mil pesos, sobre todo por las de guerreros, las grandes; esos "monos"con lanzas, pero los que hacen el negocio son los que van por ellas.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) no habla oficialmente del tema, pero los especialistas coinciden en que México es uno de los países con mayor saqueo de bienes culturales y su región occidente una de las más afectadas en América Latina.
El INAH tiene registrados 42 mil 991 sitios arqueológicos y se cree que el 40% han sido saqueados, pero tampoco hay cifras oficiales. Arqueólogos dicen que de 20 a 30 sitios se destruyen diariamente y sólo 176 en 19 estados de la república son considerados “zonas arqueológicas” abiertas al público.
El director de la División de Objetos Culturales y de Patrimonio Inmaterial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), Edouard Planche, el "alto saqueo" en México sólo es comparable con países en guerra como Irak, Camboya, Afganistán y Colombia.
Arqueólogos de Nueva York han estudiado el saqueo en Irak y compara el peligro de robo de bienes culturales mexicanos con ocurrido en aquel país en guerra; lamentan “el saqueo de los países pobres, dueños de mayor riqueza arqueológica. La gente rica en el Occidente compra y no le importa de dónde vienen las piezas; nadie piensa que es ilegal, arrestan a muy pocos; la complicidad se suma y las piezas en lugar de ir a museos van a donadores ricos.
APRECIADAS EN EL MUNDO
El catálogo en línea de piezas precolombinas de la casa de subastas Sotheby’s, en Londres y Nueva York, muestra una “mujer de Jalisco sentada” vendida 3 mil 738 dólares, y un “jorobado de Jalisco agachado” en 2 mil 875 dólares, vendidas con lotes de de los estados de Veracruz, Colima, y las regiones maya y olmeca, con precios de hasta 600 mil dólares por pieza.
La galería parisina Binoche Renaud Giquello —que ya tuvo una denuncia del gobierno mexicano por una subasta de piezas producto de excavaciones clandestinas realizadas el 14 de junio— exhibe en su página web una pieza de “actualidad”, una máscara funeraria teotihuacana en piedra verde a 125 mil euros.