+ Podría subir cada mes, advierten industriales; culpan a especuladores y gobierno
CD. DE MEXICO, 12 DE Diciembre de 2010.- La Unión Nacional e Industriales de Molinos y Tortillerías dijo que desde este día el kilo de tortilla cuesta 4 pesos más, es decir, entre 12 y 15 pesos dependiendo de la región del país donde se adquiera.
El dirigente de la organización, Lorenzo Mejía, dijo que la medida se debe a los aumentos en el costo de los insumos del sector, exigiendo la apertura de una mesa de diálogo con el Gobierno federal, para no tener que llegar a un aumento más constante, tal cual ocurre con la gasolina.
Hace cinco días, el titular de la Procuraduría Federal del Consumidor, Antonio Morales de la Peña, dijo que no se justifica aumentar los precios de productos de consumo básico, entre ellos la tortilla, como ya ocurre zonas del Distrito Federal e interior del país.
Mejía sin embargo, lamentó que mientras el Gobierno federal `apapacha´ a especuladores y empresas como Cargill y Gruma, se atenta contra los pequeños productores.
El dirigente fue abordado por periodistas y acusó que los costos de producción "nos han orillado a tomar la determinación de incrementar el precio de la tortilla, que podría llegar a un mínimo de 12 pesos el kilogramo en promedio, pues en algunos estados del norte se vende hasta en 14 y 15 pesos. La masa de nixtamal se incrementaría 4.50 pesos el kilo en promedio para las tortillerías. Es ésto o la quiebra".
Aseguró que los "coyotes" subsidiados y "protegidos" por el Gobierno federal tienen a los molineros y productores de tortilla del país con una "bota en el cuello" y orillan a la quiebra a miles de pequeños industriales, con lo cual se están perdiendo miles de empleos y patrimonios.
Dijo estar de acuerdo con el secretario de Economía, Bruno Ferrari, cuando declaró "cuando se asoleaba" en Cancún, que no se justifica el precio del maíz y la tortilla, pero pidió dejar claro que es el propio Gobierno el que lo provoca al "no meter en cintura" a los especuladores, “al seguirlos subsidiando y no limitar su voracidad y desmedida ambición”.
Propuso medidas urgentes, una de ellas, que la masa de nixtamal y tortilla tradicional de nixtamal cuenten con un precio oficial reglamentado y controlado por el Ejecutivo en todos sus niveles, por al menos 10 años.
Además, pidió que se condonen a los pequeños productores de masa y de tortilla los adeudos con la Comisión Nacional del Agua, con la Comisión Federal de Electricidad, con el IMSS y con la Secretaría de Hacienda para agilizar la incorporación de estos industriales a los programas de apoyo.
Los ataques que enumeró como impedimento para sostener el precio de este producto base en la dieta del mexicano, son la especulación, el aumento mensual de gas, gasolina y electricidad, a lo cual debe agregarse el pago de renta, empleados, seguro social, prestaciones, mantenimiento de maquinaria y equipo, para confirmar que las escasas utilidades que tenían queden pulverizadas.