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Describe periodista el ataque

+ Que eran de los “Zetas”, le dijeron; autoridades no lo creen

          HERMOSILLO, Son., 12 de mayo de 2012.- Gerardo Ponce de León dice que “las personas que me golpearon dijeron que eran ‘zetas’, pero eso fue una cortina de humo” en una rueda de prensa.

Estaba en silla de ruedas, cubierto su rostro con una gasa para ocultar parte de su lesión en la frente, el brazo izquierdo enyesado y una férula en un dedo de su mano derecha, cuando atendió a los periodistas en el Hospital CIMA.

Ponce de León describió la agresión sufrida la mañana de viernes, y las amenazas de sus golpeadores, señalando que primero llegó una persona y preguntó: ¿Tú eres Gerardo Ponce de León?

Al contestarle que sí, “me dijo que lo habían enviado conmigo y posteriormente me pidió un vaso de agua”.

“Ese es un truco viejo y caí, no cerré la puerta y al acudir a sacar el agua y cuando se la entrego, sacó una vara metálica retráctil y me pega un ‘descontón’”, señaló y agregó que a causa del golpe cayó al suelo con la cara reventada y comenzó a cubrirse con los brazos para tratar de evitar más impactos.

“Al caer al suelo me dice:’ Soy de los Zetas y nosotros tenemos la plaza, para que se te quite y aprendas; ya sabemos dónde vives, dónde trabaja tu esposa y dónde están tus hijos’, y me dio otros dos o tres varillazos”, para luego, culminada la agresión, y pidió que saliera del Estado.

“¿Cuánto tiempo quieres para que te vayas del Estado?, me preguntó y le contesté: Tú dime, y solamente me dijo; No, tú dime cuándo te vas”, añadió. Luego entró a la oficina otro sujeto, joven, que portaba una daga, entró a su oficina, y tomó su cartera, las llaves de su auto, teléfono y radio “y me pidieron que me metiera al baño, donde me exigieron que me arrodillara y les diera la espalda”.

Oyó el ruido de la puerta, esperó un poco, salió a la calle y pidió auxilio, y así llegó al hospital.

De la expresión de los atacantes, tanto la Secretaría de Seguridad Pública como la Procuraduría General de Justicia dijeron que es “una cortina de humo” y desestimaron que fueran miembros del célebre grupo criminal quienes provocaron las lesiones al comunicador.