Banner

Exigen esclarecer atentado en CO

+ Indigna al líder del PRI el ataque a cetemistas

          CD. OBREGON, Son., 15 de Marzo, 2012.- Tras manifestar solidaridad a los cetemistas heridos gravemente en Cajeme, el presidente del PRI Rosario Rodríguez Quiñones exigió el esclarecimiento de este violento atentado y conminó a las autoridades de los tres niveles de gobierno a atender el problema de seguridad en Sonora.

“Pareciera que el nuevo gobierno está más preocupado por el próximo proceso electoral, y en sus intereses personales, que en garantizar la tranquilidad de los sonorenses”, expresó el líder de los priistas, tras lamentar la poca sensibilidad de los responsables de asegurar la estabilidad y la protección en Sonora.

“La inseguridad pública en Sonora ha rebasado a las autoridades, esto si son hechos no dichos”, recalcó Rodríguez Quiñones quien lamentó que no se tenga una estrategia para garantizar la seguridad de los sonorenses.

Como ejemplo de esto enfatizó, “es la falta de prevención del PAN gobierno, respecto a la designación de un nuevo Procurador de Justicia en Sonora, partiendo de que la inseguridad es el principal problema a nivel nacional y lo cual parece no preocuparles”.

En ese sentido, Rodríguez Quiñones mostró su preocupación por los hechos violentos que evidencian la presencia y actuación del crimen organizado en el Estado, que desde ya hace algún tiempo ha cobrado la vida de civiles, así como de líderes sonorenses, tal es el caso del fallecimiento de transportistas en Ciudad Obregón.

Luego de arribar al hospital donde son atendidos los cetemistas heridos y de  refrendar su solidaridad y todo el apoyo a los familiares de las víctimas, entre ellas el regidor priista con licencia, Jesús Jaime Gámez Gómez, el dirigente reflexionó sobre los lamentables hechos y  la afectación que causan a las familias que han padecido este tipo de actos tan cobardes.

Rodríguez Quiñones dio un voto de confianza a los responsables de la seguridad en Sonora, de quienes espera que desde ya se pongan a trabajar, porque es condenable que la seguridad pública esté rebasando todos los límites, desde el ciudadano que es asaltado en la vía pública hasta personajes políticos.